Las leches vegetales se convierten en una alternativa saludable y adecuada desde un punto de vista nutricional a la leche de vaca, que como de buen seguro sabrás, es una de las bebidas más ricas en lactosa. Aunque es cierto que no deben ser llamadas con la denominación de «leche vegetal», siendo su nombre más correcto el de bebida vegetal.
La intolerancia a la lactosa consiste en un trastorno común (más de lo que en realidad se piensa), que afecta a aquella persona que tiene un déficit de lactasa, no siendo capaz de absorber la lactosa de manera correcta en el intestino delgado, pasando rápidamente al intestino grueso sin descomponerse, donde empieza a fermentar.
¿Qué es el sésamo?
Como ya descubríamos en una nota anterior en la que te hablábamos de los diferentes beneficios de las semillas de sésamo, son unas semillas también conocidas con el nombre de ajonjolí, y se caracteriza por ser una planta cultivada especialmente por sus semillas.
Las semillas de sésamo son especialmente ricas en minerales, entre los que destacan el calcio, hierro, zinc, cobre, cromo, fósforo y magnesio; además también aporta grasas insaturadas y proteínas.
Entre sus virtudes nutricionales más interesantes, debemos destacar sus virtudes a la hora de prevenir la infertilidad masculina por su contenido en zinc, ayuda a reducir los niveles de colesterol y es ideal para mujeres embarazas y que se encuentren en la menopausia.
¿Y la leche de sésamo (o bebida vegetal de sésamo)?
Se trata de una bebida de origen vegetal que se elabora a partir del licuado o batido de las semillas de sésamo crudas o tostadas, después de haberlas dejado en remojo durante algunas horas para facilitar precisamente su posterior licuado. Luego, como veremos en el apartado dedicado a ello, deben ser filtradas o colocadas para eliminar los restos de semillas que pueden quedar en el líquido.
Si piensas elaborarla en casa probablemente te sorprenda su apariencia, ya que posee un color y un aspecto bastante similar al que posee la leche de origen animal, independientemente de que sea la leche de vaca o la leche de cabra.
No obstante, respecto a su sabor, es cierto que se trata de una bebida especialmente indicada para quienes disfrutan con el curioso sabor de las semillas de sésamo, aunque es más bien suave.
¿Qué beneficios nos ofrece la leche de sésamo?
Como te explicábamos brevemente en las líneas anteriores, la leche de sésamo es una bebida de origen vegetal que se obtiene a partir de las semillas de sésamo o ajonjolí, y que se convierte en una excelente alternativa para quienes no pueden beber leche con lactosa.
Al igual que la soja, la leche de sésamo es especialmente rica en lecitina, ácidos grasos insaturados (destacando sobretodo los ácidos grasos omega 6 y omega 9), vitaminas y minerales (sorprendiendo por su altísimo contenido en calcio).
Entre los beneficios de la leche de sésamo más interesantes, destacamos los siguientes:
- Ayuda a reducir los niveles altos de colesterol en sangre.
- Previene el agotamiento nervioso y cerebral.
- Evita la arteriosclerosis.
- Útil en estados carenciales: debilidad ósea, osteoporosis y pérdida del cabello.
- Adecuada en el tratamiento de problemas nerviosos, como ansiedad, estrés, irritabilidad o depresión.
Además, es una bebida vegetal muy interesante cuando es incluida en dietas de adelgazamiento, puesto que posee fibra que ayuda a mejorar la motilidad intestinal y regula el tránsito intestinal. Y como indicábamos, también contiene lecitina, la cual es capaz de disolver las grasas naturalmente.
¿Cómo hacer bebida vegetal de sésamo?
Como comprobarás a continuación, la elaboración de la bebida vegetal de sésamo es realmente sencilla. Y es una opción excelente no solo si deseas sustituir la leche de vaca (o cualquier otra leche de origen animal), sino si te encanta el sabor que tienen las semillas de sésamo, ya que la bebida se queda con un sabor bastante similar.
Para elaborar la bebida puedes utilizar tanto semillas de sésamo doradas como oscuras (tostadas). El resultado final dependerá de cómo te guste más:
Ingredientes:
- 1/4 taza de semillas de sésamo
- Medio litro de agua
Preparación:
- Pon las semillas de sésamo en el molinillo.
- Muélelas bien.
- Agrega ahora las semillas de sésamo molidas al vaso de la batidora.
- Agrega el agua y bátelas bien.
- Luego deja macerar en un cazo durante 4 horas.
- Pasado este tiempo filtra o cuela la bebida.
- Al momento de servirla puedes endulzarla al gusto, ya sea con panela, con azúcar moreno o con miel.
Y si no deseas tomártela en el momento, puedes conservarla en una botella de vidrio en la nevera. Se conservará perfectamente durante 3 días.
Puedes también elaborarla siguiendo los pasos que te indicamos en nuestra nota dedicada a la leche de ajonjolí.
¿Cuándo no es adecuado consumirla?
Lo cierto es que la leche de sésamo no posee prácticamente contraindicaciones ni efectos secundarios. A no ser que, claro está, tengas alergia al sésamo, a la semillas o a los granos. En este caso no se recomienda ni aconseja su consumo por precaución.
De otro lado, sí se trata de una bebida vegetal desaconsejada para personas con diarrea y otros problemas gastrointestinales.
Es posible que si tras comer sésamo presentas urticaria, rinitis alérgica, dermatitis u otros problemas relacionados, se aconseja consultar al médico ya que cabe la posibilidad de que tengas alergia al sésamo.
Si quieres saber más sobre otras leches vegetales, te aconsejamos leer las siguientes notas:
Imágenes | Istockphoto
- Sesame Seed Food Allergy. Ilan Dalal, Michael Goldberg, Yitzhak Katz. Current Allergy and Asthma Reports (2012, Volume 12). Disponible en: https://link.springer.com/article/10.1007%2Fs11882-012-0267-2
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