¿A quién no les gustan las torrijas? También conocidas con los nombres de torreja o tostada, nos encontramos sin ninguna duda ante un maravilloso postre característico de las celebraciones tanto de Cuaresma como de Semana Santa en España, aunque es cierto que son ideales para disfrutar en definitiva en prácticamente cualquier momento del año, por su amplia versatilidad, por su sabor, por su aroma… ¡y porque están riquísimas!. Pueden comerse acompañadas con miel o simplemente espolvoreadas con azúcar.
Pero, ¿en qué consisten? Básicamente podríamos decir que una torrija es una rebanada de pan empapada en leche con miel y especias, que es rebozada en huevo y finalmente es freída en una sartén con abundante aceite. Es común que estas torrijas sean luego aromatizadas con canela y endulzadas con miel, azúcar o almíbar.
En España se trata de un postre muy asociado a la Cuaresma, posiblemente por la necesidad que hace algunos siglos existía de aprovechar el pan sobrante que era menos consumido cuando no se podía comer con carne.
Un poco de historia: el origen de las torrijas
Se trata de un plato dulce que podemos encontrar en buena parte de Europa, donde su presencia se documenta desde la Edad Media. Por ejemplo, ya en el siglo XIV el popular recetario de Taillevent tituado Le viander nombra la receta de las tostadas doradas, que consistían en un plato rebañado en yema de huevo batido antes de pasarlas por la sartén y espolvorearlas por azúcar.
De hecho, en nuestro país este postre aparece documentada en el siglo XV, citada por el popular poeta y músico Juan del Encina (o Juan de Fermoselle), cuando habla de un plato a base de «miel y muchos huevos para hacer torrejas», e ideal como plato para la recuperación de las parturientas.
No obstante, no es hasta el año 1607 cuando nos encontramos con las primeras recetas, citadas por Domingo Hernández de Maceras en su Libro de Cozina, y poco tiempo después en el año 1611 por Francisco Martínez Motiño en su libro Arte de cozina, pastelería, vizcochería y conservería.
Receta de torrijas tradicional: ¿cómo hacerlas en casa?
Para preparar las deliciosas torrijas tradicionales necesitarás los siguientes ingredientes:
Ingredientes para las torrijas:
- Varias rebanadas de pan duro (pan casero o de campo, preferiblemente de un día o dos antes).
- Medio litro de leche.
- 125 gr. de azúcar + Azúcar para espolvorear por encima.
- 3 huevos.
- 1 ramita de canela.
- Canela en polvo.
- Aceite de oliva virgen extra.
Ingredientes para el almíbar:
- 1 cucharada de vino blanco dulce.
- Medio litro de agua.
- 125 gr. de azúcar.
- 1 cucharada de miel.
¿Y cuáles son los pasos a seguir? Te los explicamos a continuación:
En primer lugar corta el pan duro en varias rebanadas. Resérvalas. Pon en un cazo o cazuela la leche, el azúcar y la ramita de canela. Cuece la leche durante algunos minutos para que adquiera el aroma y sabor de la canela. Luego retira la ramita de canela (con cuidado de no quemarte).
Pon las rebanadas en un cuenco amplio y vierte la leche caliente sobre éstas para que se remojen lo suficiente.
Mientras tanto, bate los huevos en un cuenco amplio. Ahora vamos a preparar el almíbar: pon un cazo al fuego y añade el vino blanco dulce, el agua, el azúcar y la cucharada de miel removiendo poco a poco y con cuidado hasta que se forme una especie de jarabe.
Pon una buena cantidad de aceite de oliva en una sartén y enciende el fuego para que se vaya calentando. Cuando el almíbar esté listo apaga el fuego y retíralo.
Vamos a proceder a hacer las torrijas: reboza las rebanadas de pan en el huevo batido y fríelas poco a poco en la sartén muy caliente, hasta que se doren por ambos lados. Según las vayas sacando de la sartén pásalas al recipiente con el jarabe, y finalmente pasa a otra bandeja.
Para terminar, espolvorea un poco de azúcar y una pizca de canela en polvo por encima de las rebanadas y una pizca de canela. ¡A disfrutar!.
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