Las estrías consisten básicamente en líneas o rayas finas que aparecen fundamentalmente en el abdomen, los senos, las caderas, los muslos y los glúteos. Son marcas delgadas, alargadas y ligeramente onduladas, que aunque no son dañinos para la salud ni poseen ningún tipo de efecto perjudicial para el cuerpo, es cierto que sí pueden acabar siendo enormemente antiestéticas, al no ser tan agradables a la vista. Si bien es cierto que pueden no desaparecer nunca realmente, con el tiempo sí pueden disminuir o incluso mediante la ayuda de determinados tratamientos, productos y procedimientos.
Son varias, como veremos, las causas que pueden influir en la formación y aparición de las estrías. Es cierto que, cada vez que la piel se estira muy rápidamente, existe la posibilidad de que se formen. De ahí que el embarazo, por ejemplo, sea uno de los factores de riesgo más comunes y evidentes, a lo que se unen los cambios hormonales que habitualmente ocurren durante esta etapa, haciendo que la piel se vuelva más seca y más vulnerable justo en los momentos en los que está creciendo muy rápido. Por tanto, las estrías son básicamente cicatrices, que se producen cuando los diferentes tejidos subyacentes tienden a crecer demasiado rápido, y se producen pequeñas laceraciones -total y completamente indoloras- en las profundidades de la dermis.
Son estos pequeños desgarros los que originan la formación de cicatrices, que luego acaban apareciendo en la capa superior de la piel como pequeñas líneas, o rayas con apariencia dentada. Por otro lado, también se sabe que el riesgo a que se formen durante el embarazo suele ser mayor cuando la gestación ocurre a una etapa o edad más temprana. Por ejemplo, un estudio encontró un riesgo mayor de desarrollar estrías cuando las futuras mamás eran más jóvenes.
En cualquier caso, no es necesario que la mujer esté embarazada para que puedan surgir o aparecer. De hecho, la gestación no es el único momento de la vida en el que las estrías pueden aparecer. Por ejemplo, algunas pueden aparecer durante la pubertad, después de un crecimiento rápido y repentino, o después de un desarrollo muscular muy rápido o luego de un aumento de peso. Y, nuevamente, las mujeres no son las únicas que pueden sufrirlas. Los hombres, es cierto, también pueden desarrollarlas, aunque es cierto que las mujeres presentan una mayor probabilidad de padecerlas. A pesar de ello, se calcula que en torno a un 40 por ciento de los adolescentes varones las desarrollan durante la pubertad, en algún momento.
La genética también tiende a influir muchísimo. De hecho, existe una fuerte asociación entre la genética y la formación de estrías. De esta forma, si tu madre o tu abuela las contrajeron durante la gestación (o, en definitiva, en cualquier otro momento o etapa de la vida), la probabilidad de desarrollarlas es muchísimo mayor, sin importar la cantidad de producto o loción que utilices con la finalidad de evitarlas o reducir al máximo el riesgo de que se formen.
Por suerte, existen una amplísima variedad de diferentes tratamientos que pueden ser de cierta ayuda a la hora de reducir al máximo la apariencia de las estrías. No obstante, antes de descubrirlos es de vital importancia conocer cuáles son las diferencias que existen entre las estrías rojas y las estrías blancas. Y, entre los remedios caseros más útiles y efectivos, a continuación te proponemos una recopilación con algunas de las opciones más interesantes.
Exfoliante de azúcar
El azúcar es considerado como un método de microdermoabrasión natural muy interesante a la hora de exfoliar la piel naturalmente, lo que ayudaría positivamente a la hora de reducir las estrías más visibles, disimulando algunos de sus síntomas más evidentes. Por suerte, elaborar un exfoliante de azúcar es sumamente fácil y sencillo. Solo necesitas una taza de azúcar y ¼ taza de aceite de almendras dulces (o aceite de coco).
Luego, una vez tengas los dos ingredientes, mézclalos bien hasta obtener la consistencia deseada. Ahora añade un poco de jugo de limón recién exprimido, y vuelve a mezclar de nuevo. Para terminar, simplemente frótate esta mezcla en la parte del cuerpo donde desees tratar las estrías.
Es conveniente repetir este proceso varias veces a la semana, a ser posible siempre en la ducha o durante el baño. ¿Lo mejor? Frotar la piel con este exfoliante entre 5 a 10 minutos, para conseguir que los resultados sean los esperados.
Jugo de áloe vera fresco
Por el momento, es cierto, no existe la suficiente evidencia clínica que demuestre que el áloe vera sea eficaz como tratamiento antiestrías. Aunque sí se sabe que el áloe vera puro se convierte en un principio activo con interesantes cualidades curativas, además de actuar como un excelente suavizante de la piel. Gracias a ello, se convierte en un remedio natural muy útil para el tratamiento de las estrías.
Para preparar este remedio casero, únicamente debes tener en casa una planta de áloe vera. Corta una de las hojas de la planta, coloca la parte cortada sobre un tazón o cuenco pequeño y deja que toda la pulpa y el jugo salga poco a poco.
Luego, únicamente debes aplicarte este gel de áloe vera puro encima de las estrías, diariamente después de la ducha o baño. Hasta observar cierto beneficio.
Aceite de coco
El aceite de coco es uno de los mejores aceites vegetales que existen para aplicar sobre la piel del cuerpo. Aunque es cierto que sobre la piel del rostro tiende a no ser tan adecuado o recomendable, principalmente si tenemos en cuenta que se trata de un aceite comedogénico, lo que significa que puede obstruir los poros y aumentar el riesgo de que se produzcan brotes de acné. No obstante, aplicado sobre la piel del resto del cuerpo sí ofrece interesantes cualidades.
Por ejemplo, destaca enormemente por sus interesantes cualidades curativas, pudiendo ser capaz, incluso, de reducir el tiempo que las cicatrices tardan en curarse en la piel.
¿Lo mejor? Aplicarte un poco de aceite de coco virgen sobre las estrías todos los días, lo que podría ser de mucha utilidad a la hora de conseguir disminuir al máximo su color rojizo. Además, a menos que exista alergia, se convierte en una opción de tratamiento natural sumamente segura.
Igualmente, también puedes mezclar a partes iguales aceite de almendras dulces con aceite de coco, convirtiéndose incluso en un remedio natural todavía más efectivo para tratar y luchar las estrías. Para ello, una vez mezclados ambos aceites, aplícate sobre la piel y masajea con regularidad, hasta que observes cierta mejoría.
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Jugo de limón
El jugo de limón recién exprimido es sumamente conocido por sus cualidades blanqueadoras, de manera que ayuda a reducir las partes más visibles de las estrías, de forma simple, fácil y sencilla.
Su preparación y aplicación, de hecho, se caracteriza por ser tremendamente simple y sencilla. Basta con exprimir un limón diariamente y extenderlo por las áreas de la piel a tratar con la ayuda de un suave masaje. O, simplemente, frotar una rodaja de limón en las estrías cada día, para ver el resultado esperado.
Eso sí, a la vez que actúa como un blanqueador natural de la piel, también puede hacerla más sensible a la acción de los rayos ultravioleta, pudiendo oscurecerla en lugar de aclararla o blanquearla. Por tanto, es fundamental evitar utilizar el jugo de limón en aquellas zonas comúnmente expuestas al sol, o cuando tengas pensado tomar el sol en la playa o en la piscina.
Aceite de albaricoque y mascarilla
¿Sabías que los albaricoques poseen una enorme cualidad exfoliante? Esto hace que sean tremendamente efectivos a la hora de disminuir e incluso curar las estrías.
Para preparar este remedio únicamente debes cortar 2 o 3 albaricoques, retirar las semillas y triturar la fruta hasta formar una pasta. Luego, aplícate esta pasta a modo de mascarilla sobre las zonas más afectadas por las estrías, y deja que el remedio natural actúe durante al menos 15 minutos.
Pasado este tiempo, con la ayuda de un poco de agua tibia, enjuágate la piel. Si es necesario, repite el proceso diariamente durante al menos un mes, para ver los resultados esperados.
Por otro lado, el aceite de albaricoque también puede convertirse en otra opción excelente, gracias a que posee cualidades rejuvenecedoras de la piel, de manera que es igualmente de cierta utilidad a la hora de disminuir y reducir las estrías al máximo. En este caso únicamente debes mezclarlo con un poco de jugo de limón recién exprimido, y masajearte luego esta mezcla sobre la piel, para obtener resultados efectivos.
Manteca de cacao
La manteca de cacao puede convertirse en un remedio natural ciertamente efectivo a la hora de reducir las estrías, gracias a que por su textura y consistencia es capaz de filtrarse en la dermis (la capa intermedia de la piel) y no únicamente en la epidermis (capa superior). Así, justo cuando la manteca de cacao es absorbida en la dermis, puede ser capaz de retener todavía una mayor cantidad de humedad. Gracias a ello, ayuda a suavizar las estrías, e incluso puede acabar convirtiéndose en un excelente preventivo.
Por este motivo, al comienzo del embarazo muchos expertos en belleza aconsejan a las embarazadas aplicarse manteca de cacao en aquellas áreas del cuerpo que pueden verse fácilmente afectadas por las estrías desde el primer mes, hasta justo el momento del parto. Además, también es aconsejable continuar aplicándola a medida que el cuerpo de la mamá vuelve a su estado anterior a la gestación, a medida que la piel comienza a encogerse.
Debido a ello, este ingrediente natural se convierte también en una opción excelente para programas de pérdida de peso, y, a su vez, durante los períodos de crecimiento acelerado o rápido de los adolescentes (pubertad).
El mejor momento para usar la manteca de cacao es siempre por la noche, para dejarla actuando durante toda la noche. Por tanto, después del baño y antes de irte a la cama, únicamente tienes que aplicarte un poco de manteca por la piel, con la ayuda de un masaje suave, a ser posible cada día (por ejemplo, si es durante el embarazo, durante prácticamente todos los meses que dure la gestación e incluso unos meses más tarde después del nacimiento del bebé, hasta observar que las estrías se reducen y desaparecen).
Jugo de pepino y limón
El jugo de limón fresco contiene una acidez natural que puede ser de mucha ayuda a la hora no solo de curar, sino también de reducir las cicatrices, a la vez que el jugo de pepino brinda un efecto calmante que deja la piel lo más fresca y desinflamada posible, motivo por el cual es muy común que, las rodajas de pepino, se utilicen para tratar y disimular al máximo las bolsas que se forman habitualmente bajo los ojos.
Para elaborar este remedio casero únicamente debes licuar un pepino, partir un limón por la mitad y exprimirlo para obtener todo su jugo. En un cuenco pequeño mezcla ambos jugos a partes iguales, y luego aplícate esta mezcla sobre las áreas afectadas (esto es, donde pueden formarse o han aparecido las estrías), y masajea hasta que la piel lo haya absorbido por completo. Luego, déjalo en la piel durante 10 a 15 minutos, y finalmente enjuaga con agua tibia.
Aceite de argán
El aceite de argán es otro aceite de origen vegetal sumamente conocido por sus cualidades sobre la piel. Por este motivo, ha pasado a convertirse en un ingrediente más indispensable en la formulación de muchos productos, como ingrediente activo.
De hecho, es una aceite total y completamente natural que destaca por su elevado contenido en vitamina E, la cual es eficaz a la hora de evitar el estrés oxidativo, reducir la acción negativa de los radicales libres y aumentar la elasticidad de la piel, todo ello de forma total y completamente natural.
Para disfrutar de sus cualidades antiestrías, solo es necesario aplicarte una pequeña cantidad de este aceite en las palmas de las manos y hacerte un masaje suave sobre la zona a tratar. Ayudará a curar los tejidos rotos de forma gradual, poco a poco y con el paso del tiempo, ayudando a que las marcas acaben desapareciendo.
Claras de huevo
La clara de huevo se convierte en un superalimento para la piel, gracias principalmente a su elevadísimo contenido en proteínas y aminoácidos esenciales (lo que significa que es necesario proporcionarlos a nuestro cuerpo a través de la alimentación, porque nuestro organismo no es capaz de producirlos por sí solo).
Y, de acuerdo a algunas personas que las han probado, cuando la clara de huevo se aplica sobre las estrías ayuda a aclararlas fácilmente, a la vez que tensa la piel.
Jugo de patata
Las patatas contienen almidón, así como otras enzimas capaces de iluminar y blanquear la piel de manera natural. Por este motivo, es muy habitual que se utilicen con la finalidad de aclarar manchas sobre la piel, ojeras y otras imperfecciones, al blanquearla naturalmente.
Por tanto, también pueden acabar convirtiéndose en una opción natural excelente a la hora de reducir eficazmente la visibilidad de las estrías, siempre y cuando se aplique con cierta regularidad.
Para elaborarlo, solo tienes que pelar una patata y triturarla bien en una licuadora para obtener su jugo. Luego, empapa una almohadilla o disco de algodón, y aplícatelo seguidamente sobre el área donde se encuentren las estrías.
Aceite de oliva
El aceite de oliva es un ingrediente único a la vez que maravilloso, repleto de antioxidantes naturales, grasas saludables y otros nutrientes interesantes para reparar el daño producido a la piel. En este sentido, lo más aconsejable es utilizar aceite de oliva virgen extra, así como cualquier otra variedad de aceite de oliva prensado en frío, el cual es de muchísima utilidad a la hora de reducir las estrías, haciendo que se desvanezcan poco a poco, con el tiempo.
Para aplicártelo los pasos a seguir son tremendamente simples y sencillos: únicamente debes ponerte una pequeña cantidad de producto sobre las palmas de las manos, y masajearte suavemente hasta que la piel haya podido absorberlo. Igualmente, se recomienda aplicártelo cada día, hasta que notes cierta mejoría en la visibilidad de las estrías.
Lo cierto es que también puedes utilizar aceite de oliva para elaborar un exfoliante con azúcar y jugo de limón. Para ello, únicamente debes exprimir un limón, y mezclar en un cuenco pequeño azúcar, jugo de limón recién exprimido y aceite de oliva. Mezcla bien hasta formar una combinación uniforme. Y, para acabar, aplícate el producto sobre las estrías, frotando durante 10 minutos. Para terminar, enjuágate con un poco de agua tibia.
Aceite de ricino
El aceite de ricino también es otro ingrediente natural que, en algunas ocasiones, podemos encontrar en distintos productos para el cuidado de la piel. Actúa como un buen cicatrizante natural, por lo que aplicado directamente sobre las estrías en forma de masaje, y con movimientos circulares, puede ayudar muchísimo a la hora de disminuir su apariencia.
¿Cómo hacerlo? Es muy sencillo: solo tienes que aplicarte una pequeña cantidad de este aceite sobre las palmas de las manos, y aplicarlo sobre las estrías mediante masajes con movimientos circulares entre 15 a 20 minutos. Luego, una vez aplicado el masaje, es conveniente cubrir el área con la ayuda de un paño de algodón fino, y aplicarte un poco de calor con la ayuda de una almohadilla térmica. Eso sí, para obtener los mejores resultados, es recomendable hacerlo cada día durante al menos un mes.
Té negro
El té negro se convierte en una bebida maravillosa, llena de vitaminas, minerales y antioxidantes de origen natural. De hecho, entre los nutrientes que contiene su composición debemos mencionar la presencia de la vitamina B12, la cual ayuda a controlar la pigmentación de la piel.
A la hora de utilizar el té negro para las estrías, únicamente debes preparar la bebida como habitualmente la preparas, hirviendo un par de cucharadas de té negro, y añadir además un poco de sal. Una vez preparado, deja que la bebida se enfríe por completo.
Finalmente, aplícate el té negro sobre las marcas de las estrías, repitiendo el proceso hasta que consigas que desaparezcan por completo.
Cómo hacer mascarillas antiestrías para la piel
Mascarilla nutritiva
Las mascarillas se convierten en una opción excelente a la hora de nutrir y cuidar la piel de forma fácil y sencilla, ya que proporcionan todo un conjunto de diferentes nutrientes y enzimas útiles a la hora de tratar una amplísima variedad de trastornos y problemas cutáneos. En esta ocasión te proponemos una mascarilla nutritiva, ideal para reducir las estrías de forma simple, fácil y sencilla. Y lo que es aún mejor: de manera totalmente natural.
Ingredientes: 2 yemas de huevo batidas, jugo de limón, 2 cucharaditas de avena, 2 cucharaditas de pasta de almendras, leche.
Elaboración: Separa las claras de las yemas de huevo y bátelas muy bien. Parte el limón por la mitad y exprímelo para obtener su jugo. En un cuenco añade todos los ingredientes en las cantidades indicadas, y mezcla bien para formar una pasta. Recuerda utilizar la suficiente cantidad de leche como para mezclar bien y obtener con ello una pasta lo más suave posible.
Aplicación: Una vez elaborada la pasta, tras obtener la textura y consistencia adecuadas, aplícala directamente sobre las estrías y deja secar por completo, dejando actuar durante al menos 30 minutos. Luego simplemente enjuágate con agua fría, frotando suavemente hasta eliminarla por completo. Es aconsejable aplicártela en días alternos.
Descubre: Cómo hacer una crema hidratante con aceite de coco
Mascarilla de áloe vera
Como ya hemos visto, y te hemos mencionado en bastantes ocasiones, el áloe vera se caracteriza por ser uno de los mejores ingredientes naturales que existen para el cuidado de la piel. De hecho, es tremendamente popular -y conocido- por su enorme capacidad a la hora de curar la piel. Y, como es lógico imaginar, las estrías no son una excepción. Con el áloe vera, y algún que otro ingrediente más, es posible preparar una maravillosa mascarilla antiestrías, que proporcione la mayoría de los beneficios de todos y cada uno de sus ingredientes naturales.
Ingredientes: Gel de áloe vera, 2 cucharadas de jugo de limón, 1 cucharada de aceite de almendra o de aceite de oliva, una cápsula de vitamina E.
Elaboración: En un cuenco añade el gel de áloe vera fresco, el jugo de limón recién exprimido, el aceite de almendra o de oliva, y pincha una cápsula de vitamina E para obtener todo su líquido. Luego mezcla bien.
Aplicación: Una vez elaborada la mascarilla, con la piel limpia, aplícate la mezcla sobre las estrías mediante suaves masajes, dejando actuar hasta que se haya absorbido completamente. Si lo deseas, repite el proceso cada día hasta que las estrías disminuyan.
Mascarilla de clara de huevo
Como ya hemos visto, la clara de huevo se convierte en uno de los mejores ingredientes que existen a la hora de preparar una mascarilla antiestrías, gracias a su riqueza en proteínas y aminoácidos y a sus cualidades aglutinantes, brindando a la mascarilla la textura más adecuada.
Ingredientes: 1 clara de huevo, 1 cucharadita de jugo de limón y 1 cucharadita de miel cruda.
Elaboración: Separa con cuidado la yema de la clara de huevo. Parte un limón por la mitad y exprímelo para obtener su jugo. En un cuenco, pon la clara de huevo, el jugo de limón y la miel en las cantidades indicadas. Y mezcla bien, convenientemente y con cuidado hasta que todos los ingredientes se hayan integrado adecuadamente.
Aplicación: Tras elaborar la mascarilla simplemente aplícatela sobre las áreas de la piel donde se hayan formado las estrías, aplicándotelo con la ayuda de un suave masaje. Luego deja secar entre 15 a 20 minutos, para acabar enjuagando con agua tibia una vez haya trascurrido este tiempo.
Mascarilla de cúrcuma
La cúrcuma posee excelentes beneficios para las mujeres embarazadas, ya que es capaz de disminuir tanto la inflamación como la hinchazón. Además, también contiene un ingrediente activo conocido bajo el nombre de curcumina, el cual parece ser capaz de tratar las estrías cuando esta maravillosa especia amarilla se aplica directamente sobre la piel.
Ingredientes: Polvo de cúrcuma y jugo de limón (puedes sustituir por aceite de coco o agua).
Elaboración: En un cuenco pequeño mezcla polvo de cúrcula con un poco de jugo de limón recién exprimido. Aunque, como te hemos mencionado en el apartado de ingredientes, puedes sustituirlo por agua o por un poco de aceite de coco. Mezcla bien hasta formar una pasta.
Aplicación: Una vez elaborada la mascarilla, es conveniente y recomendable aplicarte la mascarilla sobre las estrías, a ser posible entre una a dos veces al día, para maximizar sus cualidades y efectos antiestrías.
Mascarilla de áloe vera y café
El café tiene la capacidad de aclarar las cicatrices, a la vez que tensa la piel y la exfolia suave y naturalmente, siendo de mucha ayuda a la hora de disimular y suavizar las estrías. Y combinando el café con el áloe vera podemos aprender a preparar una mascarilla antiestrías sumamente interesante.
Ingredientes: Café molido y gel de áloe vera fresco.
Elaboración: En un cuenco de pequeño tamaño mezcla gel de áloe vera fresco y café molido, hasta formar una pasta lo más fina posible.
Aplicación: Masajea con suavidad esta pasta sobre la zona afectada a tratar (donde se encuentren las estrías), durante al menos 5 minutos. Luego, una vez aplicada completamente, deja que se seque totalmente, dejando actuar durante 15-20 minutos. Finalmente, limpia con la ayuda de una toalla húmeda tibia, y enjuaga con agua tibia hasta retirarla por completo.
Mascarilla de áloe vera y aceite de ricino
A las cualidades calmantes del áloe vera debemos sumarle el aceite de ricino, que es un aceite de origen vegetal ideal para disfrutar de una piel lo más perfecta posible, al ayudar a atenuar las estrías al reparar el daño del colágeno causado por la aparición de las estrías.
Ingredientes: Gel de áloe vera fresco y aceite de ricino.
Elaboración: El proceso de elaboración de esta mascarilla es todavía más sencillo y simple si cabe. Para ello, solo tienes que mezclar a partes iguales tanto el gel de áloe vera fresco como el aceite de ricino, hasta obtener una consistencia más bien acuosa. Luego calienta un poco esta mascarilla en una cacerola al fuego.
Aplicación: Cuando todavía se encuentre ligeramente caliente (pero, obviamente, sin llegar a quemar), aplícate esta mascarilla sobre la piel. Deja actuar durante algunos minutos, para finalmente enjuagarte con agua tibia y eliminarla por completo.
¿Y cómo hacer una crema casera antiestrías?
Si además de una de las muchas mascarillas antiestrías sobre la que te hemos hablado a lo largo de la presente nota, también deseas aprender a preparar una crema casera contra las estrías, te proponemos en esta ocasión una sencilla y simple receta que puedes elaborar en casa sin demasiada complicación, y con poquitos ingredientes. ¿Te animas a hacerla con nosotros?
Ingredientes: ½ taza de manteca de cacao cruda, ¼ taza de manteca de karité, ¼ taza de aceite de coco, 1 cucharadita de aceite de vitamina E, 2 cucharadas de aceite de almendras dulces, 2 cucharadas de aceite de semilla de rosa mosqueta y 20 gotas de aceite esencial de lavanda.
Elaboración: En una caldera doble, comenzaremos derritiendo con suavidad tanto la manteca de cacao como la manteca de karité y el aceite de coco, hasta que estos tres ingredientes se hayan derretido por completo y se hayan combinado adecuadamente entre sí. Luego, viértelos en un recipiente de vidrio, y deja enfriar a temperatura ambiente. Añade ahora el resto de los ingredientes, en las cantidades indicadas, y mezcla bien. Reserva en la nevera hasta que las diferentes mantecas empiecen a solidificarse (bastará con alrededor de una hora). Una vez pasado este tiempo, retira de la nevera y bate con la ayuda de una batidora de inmersión, hasta que la textura adquiera una consistencia similar a la de la crema batida. Cuando haya adquirido esta consistencia, vierte en un recipiente de vidrio, cierra y sella herméticamente, y almacena en un lugar oscuro y fresco, alejado del calor y de la luz solar (para evitar que se estropee fácilmente).
Aplicación: Cada vez que lo desees, o al menos entre dos a tres veces por día, aplícate un poco de esta maravillosa crema casera antiestrías sobre la piel del vientre, los senos y en cualquier otra parte del cuerpo donde también se hayan formado estrías.
Crema casera antiestrías sencilla
Si deseas preparar otra crema casera con cualidades antiestrías, pero que se caracterice por ser todavía más sencilla que la anterior, porque posee una menor cantidad de ingredientes, a continuación te proponemos otra receta.
Ingredientes: ½ taza de manteca de karité, ⅓ taza de aceite de coco, 4 cucharaditas de aceite de vitamina E.
Elaboración: Al baño María, derrite la manteca de karité junto con el aceite de coco, hasta que se hayan licuado y combinado completamente. Retira ahora la cacerola del fuego y deja que se enfríe durante al menos 10 minutos. Luego, una vez haya pasado este tiempo, agrega el aceite de vitamina E, y mezcla bien. Vierte ahora la mezcla en un frasco de vidrio, y reserva en la nevera hasta que se haya enfriado por completo. La mezcla debe ser cremosa pero espesa (aunque es cierto que su textura y consistencia variará en función de la temperatura de la habitación donde la conserves).
Aplicación: Para conseguir un mejor uso, es aconsejable aplicarla sobre la piel inmediatamente después de salir del baño o de la ducha, y luego secarte la piel con suaves palmaditas.
Crema contra las estrías con aceites esenciales
Si también prefieres ir un poco más allá y aprender a preparar una crema casera antiestrías tremendamente rica en aceites esenciales, así como en otros ingredientes naturales con cualidades reconocidas frente a las estrías, te proponemos ahora otra receta completa y diferente.
Ingredientes: 85 g de aceite de coco, 20 g de manteca de cacao, 20 g de manteca de karité, 6 cucharadas de agua, 4 cucharadas de aceite de almendras dulces, 2 cucharaditas de aceite de vitamina E, 15 gotas de aceite esencial de lavanda, 20 gotas de aceite esencial de ciprés y 10 gotas de aceite esencial de pomelo.
Elaboración: En una cacerola pequeña pon el aceite de coco, la manteca de cacao, la manteca de karité y el aceite de almendras dulces, y derrite a fuego muy lento, hasta que todos los ingredientes se hayan mezclado y combinado entre sí. Justo cuando los distintos aceites y mantecas se hayan derretido completamente, añade el agua, hasta que ahora todos los ingredientes se hayan combinado y estén suaves. Retira del fuego, y continúa mezclando aceite y agua hasta que la mezcla se haya enfriado a temperatura ambiente, y adquiera una consistencia más bien cremosa. Cuando la mezcla haya adquirido temperatura ambiente, añade el aceite de vitamina E, y los diferentes aceites esenciales propuestos en el apartado de ingredientes (aceite esencial de lavanda, ciprés y pomelo). Mezcla bien, y reserva en un recipiente de vidrio oscuro, alejado del calor y de la luz del sol.
Aplicación: Como en los casos anteriores, únicamente debes aplicarte la crema antiestrías varias veces a lo largo del día, incidiendo especialmente en aquellas áreas donde se hayan formado las estrías.
Otra maravillosa receta de crema antiestrías casera
Si deseas ir un poco más allá, y animarte a preparar otra receta de crema antiestrías completamente única y diferente, te descubrimos otra opción igualmente fácil de hacer en casa.
Ingredientes: 30 g de manteca de karité, 25 g de manteca de cacao, 15 g de aceite de argán, 15 g de aceite de rosa mosqueta, 5 g de lecitina líquida, 1 g de aceite de vitamina E, 5 gotas de aceite esencial de lavanda, 5 gotas de aceite esencial de incienso y 5 gotas de aceite esencial de geranio.
Elaboración: Al baño María derrite tanto la manteca de karité como la manteca de cacao, hasta que se hayan derretido y combinado completamente. Retira del fuego y deja que se enfríen un poco. Luego, una vez enfriado, añade el aceite de argán y el aceite de rosa mosqueta. Mezcla bien y ahora es el momento de añadir la lecitina líquida. Dado que la lecitina es un poco pegajosa y ligeramente pesada, debes agitarla bien antes de incorporarla completamente con las mantecas y los aceites. Continúa removiendo bien hasta que los aceites se hayan enfriado por completo. Luego añade tanto la vitamina E como el resto de los aceites esenciales. Vuelve a mezclar y agitar de nuevo hasta que los aceites adquieran una consistencia cremosa y espesa, lo que puede llevar un tiempo (para acelerar todo el proceso puedes sumergir la mezcla en un baño de hielo, en otro cuenco aparte). Cuando la crema esté espesa y fría, transfiere a un recipiente de vidrio limpio, y reserva durante al menos 24 horas para que adquiera la textura y consistencia óptimas, antes de usar.
Aplicación: Únicamente debes aplicarte una pequeña cantidad de esta crema, masajeándola suavemente en la piel, justo en las áreas donde se han formado las estrías. Es recomendable utilizar esta crema casera antiestrías todos los días, preferiblemente siempre después del baño o de la ducha, para conseguir que la piel se quede lo más suave posible. Por otro lado, dado que esta crema también actúa como un humectante maravilloso, es ideal también para pieles secas y maduras. Incluso puede ser utilizada como un hidratante corporal, aplicado en todo el cuerpo.
Cómo hacer un maravilloso aceite antiestrías
Además de los remedios caseros sobre los que te hemos hablado a lo largo de la presente nota, las mascarillas antiestrías y las cremas, también es posible aprender a preparar un completo aceite antiestrías, que combine distintos aceites vegetales con reconocida acción contra las estrías. Dado que existen múltiples opciones, a continuación te proponemos una amplia variedad de recetas. ¿Te animas a preparar también alguna de ellas con nosotros? Toma nota:
- Aceite antiestrías de lavanda y jojoba. Para elaborar este aceite únicamente necesitas 6 gotas de aceite esencial de lavanda, 4 gotas de aceite esencial de incienso, 4 gotas de aceite esencial de Neroli y 4 cucharaditas de aceite de jojoba.
- Aceite antiestrías de lavanda y pachulí. Para elaborar este aceite necesitas 6 gotas de aceite esencial de naranja, 5 gotas de aceite esencial de pachulí, 4 gotas de aceite esencial de lavanda y 4 cucharadas de aceite de rosa mosqueta.
- Aceite antiestrías de jazmín y lavanda. Para elaborarlo necesitas 8 gotas de aceite esencial de jazmín, 5 gotas de aceite esencial de lavanda y 5 cucharaditas de aceite de argán.
Para prepararlos, únicamente debes escoger cada receta, con la cantidad de ingredientes indicados, y combinarlos y mezclarlos bien en un cuenco o tazón pequeño. O, bien, añadir los ingredientes en un pequeño recipiente de vidrio, cerrarlo bien, y agitar hasta conseguir que todos los ingredientes se combinen y mezclen bien.
Finalmente, a la hora de utilizarlos, solo tienes que masajear el aceite antiestrías que hayas preparado en la piel tibia tanto por la mañana como por la noche, usando con moderación para conseguir que el aceite portador sea absorbido completamente en la piel.
Por otro lado, a la hora de conseguir que los aceites antiestrías se conserven bien la mayor parte del tiempo posible, es importante guardar la combinación de aceites en un recipiente o botella de vidrio, ya sea transparente u oscura. Eso sí, si optamos por guardarlos en una botella de vidrio o recipiente transparente, es fundamental protegerlos de la luz solar, guardándolos en un lugar lo más fresco y oscuro posible, ya que tanto el calor como los rayos ultravioleta pueden acabar afectando la calidad del aceite.
¿Lo mejor? Preparar siempre una pequeña cantidad de aceite, la suficiente para que siempre esté lo más fresco posible, por lo que es fundamental elaborar únicamente una cantidad equivalente que pueda durar como mucho una semana. Eso sí, en caso de desear hacer una cantidad más grande, es conveniente optar por añadir siempre el líquido de una cápsula de vitamina E (o aceite de vitamina E), o bien una cucharadita de aceite de germen de trigo, ya que ambos ingredientes naturales actúan a su vez como conservantes.
Otros consejos útiles que te ayudarán mucho
Además de optar por algunos remedios naturales que puedan ayudar positivamente a la hora de disimular las estrías al máximo, también es posible seguir otros consejos simples y sencillos que maximicen los efectos de los remedios caseros, como son, por ejemplo, algunos trucos dietéticos que igualmente son de enorme utilidad en este sentido. Toma nota:
- Tomar agua. Mantener una adecuada hidratación diaria es fundamental para mantener no solo el cuerpo debidamente hidratado, sino también la piel. De hecho, como opinan muchos expertos, beber entre 8 a 10 vasos de agua al día es tremendamente positivo para la salud de la piel, gracias a que es de ayuda a la hora de recuperar su elasticidad natural, manteniéndola lo más flexible y suave posible. Por tanto, gracias a este efecto, las estrías se reducen y disminuyen (al menos sus síntomas más visibles).
- Comer alimentos ricos en vitamina C. La vitamina C, como ya te hemos mencionado en algún que otro momento, consiste en un nutriente esencial de reconocida acción antioxidante, útil para evitar el estrés oxidativo y, también, la acción más negativa de los radicales libres (cuando nuestro cuerpo tiende a producirlos en exceso y sin control, debido principalmente al exceso de exposición solar). De hecho, la vitamina C destaca principalmente por ser un antioxidante total y completamente natural que ayuda a combatir no solo los radicales libres, sino también las toxinas. Por tanto, con una ingesta diaria adecuada de vitamina C, conseguimos no solo evitar el estrés oxidativo, sino que las cicatrices de la piel tiendan a curarse mucho más rápido. ¿Lo mejor? Optar por alimentos como las frutas cítricas (limón, naranja, lima y pomelo), melones, bayas, repollo crudo, kiwi, guisantes, pimientos (verdes y rojos), piña, espinacas, nabos y tomates. En este último alimento también destaca la presencia de licopeno, otro nutriente altamente antioxidante.
- Vitamina E. Al igual que la vitamina C, la vitamina E también destaca por ser un potente antioxidante, útil para combatir los radicales libres, a la vez que nutre profundamente la piel desde el interior. Puedes encontrarla en alimentos como las semillas crudas (sésamo y calabaza, principalmente), almendras, avellanas, piñones, espinacas, acelgas, brócoli, papaya, aguacate, aceitunas y perejil. Consumir diariamente alimentos con alto contenido en vitamina E ayudará a eliminar y disimular mejor las estrías.
- Ácidos grasos Omega-3. Las grasas saludables son esenciales para nuestra salud cardiovascular, y también lo son para nuestra piel. No en vano, son esenciales a la hora de aumentar y mejorar la elasticidad de la piel, por lo que pueden contribuir en gran medida a la hora de mantener a raya las estrías. Puedes optar por alimentos como el salmón, sardinas, hígado de bacalao, soja, nueces, tofu, camarones, coliflor, linaza y las semillas de chía.
- Gelatina. La gelatina es tremendamente rica en colágeno, la cual, como ya hemos visto, también la encontramos presente en nuestra piel, siendo esencial a la hora de disfrutar de una piel lo más tersa y firme posible, por lo que es de enorme utilidad para prevenir las líneas de expresión y las arrugas. No en vano, es la principal responsable de proporcionar elasticidad a la piel. Puedes optar por gelatina de postre, sin azúcares añadidos, o bien optar por el caldo de huesos (pollo, ternera o cordero), el cual se convierte en una fuente natural excelente de gelatina -y por tanto de colágeno- en la dieta.
Como vemos, a la hora incluso de disfrutar de una piel lo más saludable posible es esencial mantener también una dieta sana y equilibrada. Y seguir, en definitiva, un estilo de vida igual de saludable, evitando aquellos hábitos nocivos que pueden perjudicar negativamente a la piel, y que incluso pueden acabar influyendo en la aparición de estrías y otros problemas cutáneos comunes.
Especialmente durante el embarazo, seguir una alimentación variada, saludable y equilibrada es imprescindible, así como cuidar el peso y únicamente aumentar los kilos necesarios para la gestación. Recuerda que, durante el embarazo, es una creencia errónea comer por dos, y sí al menos cuidar la alimentación y aumentar únicamente las calorías diarias por día entre 200 a 300, como mucho.
Empezando por el principio: ¿Estrías rojas o blancas?
Es común que, las estrías, comiencen en un principio como marcas de color rojizo o púrpuras, las cuales tienden a desvanecerse lentamente, poco a poco con el paso del tiempo, hasta volverse blancas o ligeramente plateadas. De hecho, la diferencia de color distingue la propia antigüedad de estas marcas o cicatrices. Por lo que si bien es cierto que nunca desaparecerán por completo, el tratamiento sí podría aclarar el color de las mismas, o incluso encogerlas hasta conseguir que disminuyan o desaparezcan. Incluso, en algunos casos, las estrías podrían acabar desapareciendo por sí solas.
En lo que se refiere al propio color que tenga la marca en sí, es cierto que las estrías rojizas (las más nuevas) son las más sencillas y fáciles de tratar. De hecho, suelen adquirir esa tonalidad roja porque existen vasos sanguíneos debajo de la piel. Esto es, precisamente, lo que permite que las estrías de color rojo puedan responder mucho mejor el tratamiento.
Las estrías blancas, sin embargo, al ser más antiguas, suelen ser más complicadas de tratar. No en vano, con el paso del tiempo, los vasos sanguíneos se estrechan, dificultando enormemente la estimulación de la producción de colágeno. De ahí que los remedios caseros o los tratamientos más simples simplemente puedan no ser tan efectivos.
Otros tratamientos útiles contra las estrías
Además de los remedios caseros sobre los que te hemos hablado a lo largo de la presente nota, es cierto que existen una amplia variedad de tratamientos médicos útiles para el tratamiento de las estrías. A continuación te mencionamos brevemente algunos de los más interesantes o útiles.
Exfoliación
Especialmente para las estrías blancas (esto es, las más antiguas), exfoliar la piel regularmente puede acabar siendo de muchísima ayuda, puesto que esto es de enorme utilidad a la hora de conseguir eliminar el exceso de piel muerta del cuerpo, dando lugar a la aparición de una piel mucho más nueva y joven.
No en vano, junto con otros métodos de tratamiento, la exfoliación puede ayudar a mejorar los resultados, dado que al eliminar la piel muerta presente sobre las estrías ofrece la posibilidad de que otros tratamientos penetren más profundamente en la piel, y funcionen incluso de manera mucho más rápida.
Microdermabrasión
Consiste en un procedimiento completa y totalmente indoloro, en el que se puede reducir la aparición de las estrías blancas. Se trata de un procedimiento que directamente es dirigido sobre la epidermis (capa superior de la piel), y actúa sobre todo estimulando la piel con la finalidad de tensar la elastina y las fibras de colágeno.
Para ello, se rocían pequeños cristales con cualidades exfoliantes sobre el área que se desee tratar. Luego, con la ayuda de un dispositivo, los cristales son eliminados con suavidad, llevándose consigo la piel muerta acumulada de la capa de la epidermis. Aunque es cierto que se trata de un tratamiento muy interesante por el hecho de ser ciertamente eficaz, es posible que no sea capaz de eliminar por completo las estrías.
Microneedling
Se trata de un procedimiento a base de microagujas que se dirige directamente a la zona situada en la dermis, que es la capa media de donde comúnmente se forman y aparecen las estrías. Cuando se aplica este tratamiento, se introducen agujas de pequeñísimo tamaño en la piel con la finalidad de desencadenar una mayor producción de colágeno y elastina. Este aumento promueve una mejor regeneración celular, mejorando por tanto la apariencia de la piel, y reduciendo las estrías.
No obstante, para que sea eficaz es posible que el tratamiento deba llevarse a cabo durante varios meses. Además, parece ser más útil en aquellas personas con la piel más oscura.
Terapia con láser
Consiste en una opción de tratamiento útil para eliminar las estrías blancas, que como ya te hemos mencionado, se caracterizan principalmente por ser las más antiguas, y a su vez, las más complicadas de eliminar. Durante la aplicación del procedimiento, el láser es capaz de penetrar en el interior de la piel con el fin de desencadenar un nuevo proceso de regeneración, estimulando los tejidos situados alrededor de las estrías, para que puedan sanarse y curarse a un ritmo muchísimo más rápido.
Esta terapia estimula la producción de una mayor cantidad de melanina en la zona afectada, lo que significa que actúa activando las células pigmentarias naturalmente presentes en la piel. Así, las estrías acaban “mezclándose” con el tono de la piel normal. Eso sí, aunque se trata de una opción de tratamiento tremendamente útil y eficaz, requiere más de una sesión para poder ver los resultados esperados.
Para saber: Cuáles son las principales causas de las estrías
Como hemos visto, las estrías se forman principalmente cuando el cuerpo crece rápidamente por cualquier momento o causa, y la piel no es del todo capaz de estirarse lo suficiente como para poder seguir dicho ritmo. El colágeno, como ya te hemos mencionado en diferentes momentos, consiste en una proteína que ayuda a que la piel sea muchísimo más elástica y tersa. Pero si la piel no tiene la suficiente cantidad de colágeno, las marcas (estrías) pueden acabar apareciendo a medida que ésta se estira.
Y, como te hemos mencionado, las estrías pueden aparecer por algunos de los siguientes motivos:
- Aumento de peso rápido. Lo que afecta no solo a la mujer, sino también al hombre.
- Pubertad. El crecimiento infantil se acelera enormemente durante esta etapa. Sin embargo, las estrías que comúnmente se forman durante estos momentos es común que puedan desaparecer a medida que continúan creciendo.
- Embarazo. Es una de las causas más habituales, y las estrías que se forman en esta etapa son el resultado tanto de la piel estirada (debido al crecimiento y desarrollo del bebé a lo largo de los meses de embarazo), y por el aumento de hormonas, las cuales tienden a debilitar las fibras de la piel. Por suerte, pueden llegar a desvanecerse a medida que se pierde peso una vez ha nacido el bebé.
- Culturismo. La práctica deportiva, incluso en aquellas personas que tienen poca grasa, pueden hacer que se formen ciertas estrías donde los músculos más crecen.
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