Llegado directamente de Estados Unidos, de donde se cree existe una primera mención sobre este delicioso postre allá por el año 1896, el brownie es un bizcocho de chocolate de tamaño más bien pequeño. Su nombre, de hecho, proviene del inglés brown, debido a su apariencia externa (concretamente, a su color marrón oscuro). ¿Cómo podemos hacerlo fácilmente en casa?. Lo cierto es que en realidad es más sencillo de lo que piensas, tal y como te descubrimos en nuestra receta de brownies de chocolate y nueces.
Aunque no lo creas, su origen -como ocurre con otros postres deliciosos igual de tradicionales- se lo debemos a una casualidad. O, casi mejor dicho, a un error. Y es que nació cuando a un repostero norteamericano se le olvidó echar levadura a su pastel de chocolate. Fue así como nació el brownie, que consiste en un maravilloso bizcocho de chocolate que se suele servir individualmente en porciones cuadradas, al que no se le añade ningún tipo de levadura (de ahí que sea un bizcocho más bien compacto).
Ingredientes
- 100 g de nueces
- 175 g de mantequilla (en cubos)
- 300 g de chocolate negro (mínimo 70%)
- 25 g de cacao en polvo (sin azúcar)
- 300 g de azúcar
- 4 huevos
- 200 g de harina
Elaboración
- Precalienta el horno a 200 ºC.
- Engrasa un molde de hornear con forma cuadrada (ideal 23 x 30 cm), y revístelo con papel sulfurizado.
- Pica las nueces un poco y resérvalas.
- Pon la mantequilla cortada en cubos y el chocolate negro en un cuenco refractario al baño María. Derrítelo bien removiendo con la ayuda de una cuchara da madera, hasta obtener una mezcla más bien suave. Luego retira y deja que se enfríe un poco. Si deseas también puedes hacerlo en el microondas (a potencia media y con intervalos de 15 segundos, removiendo en el intervalo). Una vez frío mezcla bien con el azúcar.
- Bate los huevos en un cuenco. Una vez batidos, añádelos a la mezcla de chocolate negro y mantequilla, batiendo bien hasta que los ingredientes se integren.
- Tamiza la harina y el cacao sobre un cuenco. Luego añádelos a la mezcla de chocolate poco a poco, mezclando bien hasta obtener una masa lisa (y sin manchas de harina) pero espesa.
- Agrega las nueces ligeramente picadas, distribuyéndolas bien a lo largo de la masa.
- Vierte la mezcla de masa en el molde, y extiende con la ayuda de una espátula para llenar sin problema a las esquinas. Es conveniente que alises la superficie.
- Hornea durante 12 a 15 minutos, hasta que al pinchar con una broqueta o con un cuchillo salga cubierta con un poco de masa, pero esté firme al tacto por encima. Una vez alcance este punto, retira del horno y deja que el brownie se enfríe completamente en el molde.
- Una vez frío, levanta el brownie del molde con cuidado. Con la ayuda de un cuchillo afilado y de sierra largo, marca un total de 24 porciones iguales en la superficie. Para que las porciones salgan bien cortadas, es necesario añadir un poco de agua hirviendo en un cuenco, y entre cortes, sumergir el cuchillo en el agua caliente, secándolo luego bien antes de proceder al siguiente corte.
- Para terminar, tamiza con un poco más de cacao en polvo sobre encima.
Cómo conservar el brownie de chocolate y nueces
Lo cierto es que el brownie se conserva perfectamente bien durante 3 días en un recipiente hermético. Además, si lo conservas en nevera adquirirá una textura aún más deliciosa (personalmente, a mi me encanta frío, más que servido caliente).
¿Cómo podemos comerlo?
Es muy habitual servir la porción de brownie caliente, acompañado con una bola de helado (preferiblemente de vainilla). Aunque si deseas probar una opción innovadora, puedes optar por añadir una bola de helado de plátano o de fresas.
No obstante, también hay quien lo disfruta de forma individual, frío y sin calentar.
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