Siempre que comienza el buen tiempo, y sobretodo poco antes de que dé oficialmente comienzo el verano (y las tan esperadas y ansiadas vacaciones de verano), son muchas las personas que se proponen seguir la denominada como operación bikini.
Básicamente consiste en seguir un plan de adelgazamiento por el que se persigue perder peso fácilmente. No obstante, en la mayoría de los casos no solo no se consigue una pérdida de peso efectiva, sino que finalmente esa pérdida se traduce en un aumento del peso final por el denominado como efecto rebote.
Esto significa que la dieta que se ha seguido no solo no ha sido efectiva, sino que en definitiva no se trata de una dieta ideal para perder peso poco a poco y con moderación, sin que se produzcan posibles déficits nutricionales y evitando precisamente ese aumento de peso luego de terminar con ella.
A la hora de alcanzar el peso ideal (puedes saber más sobre el peso ideal en hombres y el peso ideal en mujeres), y conseguir y disfrutar de un auténtico peso perfecto en verano lo mejor es seguir una serie de consejos y tips dietéticos y de salud que ayuden de manera positiva.
Tips para conseguir un peso perfecto en verano
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Haz 5 comidas al día: recientemente se ha publicado un estudio científico que ha constatado con pruebas lo que muchos especialistas en salud y nutricionistas defendían desde hace años. Al realizar 5 comidas al día redistribuimos las calorías que consumimos, por lo que evitamos sentir hambre (y con ello comer en grandes cantidades y en exceso), y nuestro organismo se encuentra prácticamente todo el día “ocupado” quemando grasas.
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Sigue una dieta equilibrada y saludable: a la hora de perder peso no es buena idea seguir una dieta estricta, especialmente porque se pueden producir déficits nutricionales peligrosos. ¿Lo mejor? Seguir una dieta equilibrada, rica en alimentos sanos y saludables y comer de todo pero en pequeñas cantidades.
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No pases hambre: muchas personas piensan erróneamente que si pasan hambre y se saltan alguna comida conseguirán perder peso, pero esto es un error, dado que nuestro organismo tenderá a almacenar aún más grasa y a no utilizarla. Además, cuando lleguemos a la siguiente comida tendremos incluso aún más hambre, por lo que terminaremos por comer en exceso y no conseguiremos controlar el apetito.
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Toma líquidos: aunque es aconsejable tomar cada día de 1,5 a 2 litros de líquidos al día (agua, tés, infusiones, zumos…), en verano debemos aumentar incluso esta cantidad, especialmente en los días de mayor calor.
Imagen | o5com
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