Si hablamos de distintas herramientas que ayudan a muchas mujeres a la hora de estilizar su cabello y aportarles un aspecto renovado y diferente, no hay duda que la conocida como plancha del pelo es probablemente una de las más socorridas, usadas y populares. ¿Por qué? Fundamentalmente porque, gracias a ella, una mujer que tenga un pelo ondulado puede disfrutar rápidamente de un cabello perfectamente liso y suave.
Se trata, como vemos, de una herramienta muy popular, especialmente utilizada sobre todo en quienes tienen un pelo esponjado y ondulado. Y, en este sentido, hay quienes la utilizan muy de vez en cuando (en contadas ocasiones casi podríamos decir), y quienes tienden a usarla prácticamente todos los días.
De ser este tu caso, es bastante posible que en algún que otro momento te hayas preguntado acerca de si el uso de la plancha sobre tu cabello es seguro, si le puede o no producir daños, y si especialmente es un riesgo su utilización diario.
¿Cómo funcionan las planchas de pelo?
Nuestro cabello, concretamente cada uno de nuestros pelos, se encuentran formados por queratina, una proteína formada a su vez por una serie de aminoácidos tremendamente ricos en azufre. Estos aminoácidos forman una serie de enlaces disulfuro, que consisten en cadenas que unen un átomo de azufre con otro átomo que esté próximo a él.
En este sentido, tanto el número como la propia naturaleza de los enlaces que se forman en las fibras capilares de queratina se encuentra en realidad determinado de manera genética.
Sin embargo, ¿sabías que si aplicamos el suficiente calor sobre el cabello podemos ser capaces de romper dichos enlaces? Concretamente, al aplicar calor sobre el pelo tendemos a romper o deformar los enlaces que el cabello presenta de forma natural.
Luego, al mantener el cabello tenso a la vez que lo enfriamos al dejar de aplicar calor, tendemos a forzar a que los nuevos enlaces terminen por formarse a nuestra completa voluntad.
De esta forma, como manifiestan muchos expertos en belleza, a mayor temperatura no se consigue que el pelo se alise más rápido, sino que un calor constante pero más bajo tiende a funcionar mucho mejor, puesto que la utilización de calor por encima de la considerada como temperatura óptima para el planchado correcto del pelo es perjudicial.
¿Es malo para nuestro cabello el uso de planchas de pelo?
Algunos estudios han constatado que estos enlaces comienzan a romperse a partir de los 70ºC. Pero lo cierto es que, en realidad, la mayoría de planchas para el pelo tienden a mantener y alcanzar una temperatura que oscila entre los 120 a los 185ºC. Incluso hay marcas cuyas planchas del pelo superan esta temperatura.
De acuerdo a esos mismos estudios científicos, ¿sabías que si aplicamos a nuestro cabello una temperatura superior a los 190 grados en realidad terminaremos por quemarlo?. Esta temperatura baja a los 130 gramos si, además de utilizar la plancha de pelo, has utilizado en tu cabello un tinte, alisado o permanente, procesándolo químicamente.
Es más, son muchos los expertos que consideran que no es adecuado ni beneficioso para la salud de tu cabello utilizar la plancha del pelo más de 2 o 3 veces por semana, dado que un uso excesivo puede causar que la cutícula capilar se debilite. Y el resultado en definitiva será el menos esperado: cabello reseco, encrespado, quebradizo, áspero al tacto y con las puntas abiertas.
Además, es sumamente importante utilizar un acondicionador permanente o un producto protector que en definitiva ayuda a la hora de proteger al cabello del calor. Algo que, en realidad, pocas mujeres tienen en cuenta cada vez que utilizan la plancha del pelo.
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Consejos útiles al utilizar la plancha del pelo
Es importantísimo preparar el cabello para el planchado del pelo, y sobre todo saber cómo hacerlo para que en definitiva el pelo sea capaz de soportar el impacto tan potente de las altas temperaturas.
Por un lado, es fundamental lavar tu cabello con un champú de calidad y aplicar luego un acondicionador permanente. Luego, cuando tengas el cabello húmedo, aplicar de forma uniforme un producto adecuado para planchado del pelo, que actúa como protector térmico.
Por otro lado, retirar toda la humedad presente en el cabello secándolo muy bien. De esta forma evitarás que el cabello se queme y que las fibras capilares se debiliten prácticamente al instante.
Para terminar, si tienes un cabello normal es aconsejable que la temperatura de la plancha oscile entre los 170º a los 180º (no superando nunca los 190º), y si tu cabello es muy fino o ha sido teñido que no supere los 130º.
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