Lo cierto es que tanto la harina de arroz como la harina de maíz ofrecen maravillosos e increíbles beneficios para la piel, especialmente cuando son utilizadas para la elaboración de mascarillas caseras.
En el caso particular de la harina de arroz, es un tipo de harina fina que se elabora a partir del arroz, el cual ha sido también previamente molido. Como de buen seguro sabrás, el arroz es uno de los cereales más consumidos del mundo, convirtiéndose desde hace milenios en uno de los alimentos fundamentales en muchos pueblos del pasado.
Lo cierto es que cuando hablamos de la harina de arroz la realidad es que podemos elaborarla fácilmente en casa. Para ello, sólo necesitamos un cuenco de arroz blanco y molerlo bien con ayuda de un mortero, y pasarlo luego por una máquina trituradora (o máquina de triturar carne de la batidora) para obtener una harina fina con textura sedosa.
Beneficios de la harina de arroz para la piel
La harina de arroz aplicada sobre la piel actúa como absorbente, y además ayuda a secarla de forma completamente natural. De ahí que sea una opción económica y útil para elaborar polvos faciales y para el cuerpo.
De hecho, puede convertirse en un excelente sustituto de otros productos relacionados, como por ejemplo los polvos talco (un mineral de color blanco a gris verdoso que pertenece al grupo de los silicatos de magnesio, y que tiene muchas aplicaciones en la belleza y cosmética), gracias a sus cualidades tanto hidratantes como suavizantes de la piel.
Si deseas optar por la harina de arroz, puedes encontrarla fácilmente en herbolarios y tiendas especializadas de alimentación. O, si no, puedes prepararla tú mismo/a como te comentábamos al comienzo de esta nota.
¿Y qué beneficios aporta la harina de maíz para la piel?
La harina de maíz se elabora a partir del maíz molido muy finamente. Aunque dependiendo de su preparación, en la actualidad podemos encontrarnos con 4 tipos de harinas de maíz diferentes.
La harina de maíz es un polvo de consistencia fina que se obtiene a partir de la molienda del cereal mediante diferentes métodos. Así, por ejemplo, podemos encontrarnos con diferentes tipos de harina:
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Harina de maíz precocida: se cuece el maíz antes de cocerlo.
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Harina de maíz pelado: el maíz es hervido desgranado con cal (para poder despojarlo de su cáscara).
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Harina de maíz pilado: el maíz es molido aún crudo, para luego ser cocido.
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Harina de maíz tostado: el maíz es tostado antes de molerlo.
A la harina de maíz también se la conoce con el nombre de almidón de maíz, y en países como Colombia, México o Perú es habitual su uso no solo en la cocina (para la elaboración de recetas y platos tradicionales), sino también a la hora de preparar recetas de belleza.
Entre otros beneficios, es especialmente útil por ofrecernos las siguientes propiedades:
- La harina de maíz puede convertirse en un producto natural interesante a la hora de cuidar y proteger el cutis, gracias a su cualidad absorbente.
- Esta virtud principal convierten a la harina de maíz en un remedio útil como antitranspirante casero. Eso sí, a la hora de disfrutar de sus diferentes propiedades, es posible combinarla con harina de arroz.
Cómo usar estas dos harinas para la belleza
Para disfrutar de los diferentes beneficios que aportan la harina de maíz y la harina de arroz para la piel, puedes mezclar en un bol una cucharada de harina de maíz y una de miel, mezclando bien hasta que obtengas una mezcla homogénea y sin grumos.
Aplica la pasta resultante sobre tu rostro y deja actuar durante al menos 10 minutos. Finalmente aclara con agua templada.
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