Un masajeador anticelulítico puede convertirse en una opción especialmente útil a la hora de mejorar la conocida como “piel de naranja”, ayudando de hecho a la hora de disminuir la incómoda y molesta celulitis. Pero aunque son vendidos como herramientas poderosas y efectivas, no pueden ser usados como si de panacea se tratara, ya que no curan la celulitis, sino que pueden mejorar su apariencia. Además, como analizaremos a lo largo de la presente nota, los resultados no suelen durar mucho tiempo, siendo necesario repetir el tratamiento con algo de regularidad.
¿Qué es un masajeador anticelulítico? ¿Para qué sirve?
El masajeador anticelulítico es un dispositivo o herramienta que, de forma eléctrica o manual, masajea la piel con el fin de poner en movimiento el sistema linfático y las grasas localizadas en la zona donde es aplicado, mejorando la circulación sanguínea y promoviendo, finalmente, la eliminación de las toxinas.
Podríamos asimilarlos a dispositivos que tratan de simular y/o complementar el trabajo que lleva a cabo un profesional a través del masaje manual, al aplicar calor, ultrasonido y pulsos electromagnéticos, aunque todo dependerá de la herramienta que se vaya a utilizar.
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Eso sí, poseen una ventaja adicional añadida: gracias a su tamaño no muy grande, y su fácil manejo, son ideales para utilizarlos en casa, al ser sencillos y cómodos de usar.
Hoy en día, de hecho, es posible encontrar en el mercado una variedad bastante amplia de distintos dispositivos de masaje que afirman ser capaces de reducir la celulitis. Pero, como analizaremos en el apartado dedicado a ello, no todos son efectivos.
Por ejemplo, muchas personas tienden a utilizar rodillos de espuma, que son piezas de espuma de textura dura en forma de tubo, y los usan con la esperanza de que puedan romper la grasa, y con ello eliminar la celulitis. Sin embargo, de acuerdo al American Council on Exercise, en realidad los rodillos de espuma no hacen nada para mejorar la apariencia de la celulitis.
Tampoco existen pruebas sustanciales de que algunos dispositivos específicos, como por ejemplo podría ser el caso de los masajeadores vibratorios de mano o el cepillado en seco (que consiste en cepillar la piel seca con la ayuda de un cepillo de cerdas suaves), puedan hacer mucho por la celulitis, en especial a largo plazo. Aunque este tipo de masaje con cepillo en seco sí parece ayudar a mejorar la circulación sanguínea.
De otro lado, un producto que sí parece mostrar ciertos aspectos positivos a la hora de tratar y reducir la celulitis de forma efectiva es la endermología, cuyo equipo produce una especie de presión negativa pulsante, con la que se consigue un enrollamiento y desenrollamiento constante del pliegue continuo, gracias al desplazamiento de un cabezal especialmente diseñado, en cuyo interior podemos encontrar dos rodillos que producen ondas acústicas.
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Esta acción, combinado con los movimientos aplicados rítmicamente, ayuda a modificar la densidad de los tejidos, mejorando el intercambio no solo intercelular, sino también de los líquidos.
Pero de acuerdo a la Academia Estadounidense de Dermatología, los resultados que se han obtenido han sido más bien mixtos. Aún cuando se observe mejoría después de su aplicación, si el tratamiento no se repite, suele desvanecerse después de un mes aproximadamente.
¿Funcionan los masajeadores para la celulitis? ¿Qué dice la investigación científica?
Llegados a este punto es normal que volvamos a la pregunta que titula esta nota: ¿funcionan verdaderamente los masajeadores anticelulíticos?. Algunos estudios científicos, por ejemplo, muestran que ciertas técnicas de masaje sí pueden ser beneficiosas para reducir la celulitis. Pero estos mismos estudios coinciden en señalar algo fundamental: los resultados suelen ser siempre temporales.
Por ejemplo, un estudio publicado hace algunos años en el que se analizaron los efectos del masaje mecánico, utilizando para ello un masaje aplicado con una máquina (endermología); el masaje de drenaje linfático, en el que se utiliza una presión ligera para ayudar al sistema linfático a drenar líquidos y toxinas; y la manipulación del tejido conectivo, mediante un tipo de masaje en el que se aplica presión a los ligamentos, tejidos y tendones que conectan los músculos con la piel.
Según los resultados de este estudio, todas las técnicas analizadas fueron efectivas para disminuir la grasa, así como la circunferencia del muslo en aquellas zonas donde se llevó a cabo el masaje.
Por tanto, en función de los resultados obtenidos, podemos concluir que los masajeadores anticelulíticos pueden mejorar temporalmente la apariencia de la piel, ayudando además a la hora que la celulitis sea menos visible (o notable). Pero tanto los masajeadores para la celulitis, como los masajes en sí mismos, no son una cura para la celulitis.
Eso sí, tanto los masajeadores como el masaje por sí solo presenta muchos beneficios para la salud, por lo que es posible incorporarlo a nuestra rutina diaria o semanal, incluso aunque no tengas celulitis. Y recuerda algo fundamental: la celulitis es completamente normal, a pesar de que siempre la han rodeado bastantes mitos.
Y aunque no sea peligrosa ni suponga ningún tipo de problema para la salud, si te preocupa su apariencia lo mejor es probar algún masaje para tratar la celulitis, o incluso optar por algún masajeador anticelulítico de probada eficacia. La clave, como vemos, está en la regularidad, y sobre todo, en tener bien claro que no son una cura para el problema, sino que únicamente ayudan a disminuir su apariencia.
Otras opciones útiles a la hora de reducir o eliminar la celulitis
Lo cierto es que, en realidad, no existe ningún tratamiento que pueda librarnos mágicamente de la celulitis, sobre todo de manera o forma completa. Como hemos visto en varias ocasiones, al estar genéticamente vinculado y a la estructura tan complicada de la propia piel, tanto prevenirlo como eliminarlo se convierte en una tarea casi imposible.
También es necesario tener en cuenta algo fundamental: la mayoría de los tratamientos que sí pueden ser de utilidad deben llevarse a cabo de manera consistente, especialmente si deseamos ver sus efectos, dado que éstos acabarán disminuyendo si los interrumpimos. Para darnos cuenta de su importancia, podríamos pensar en este tipo de tratamientos como en el propio cuidado de la piel. Es decir, no podemos lavarnos el rostro una única vez y esperar que la cara esté siempre limpia. Con los tratamientos anticelulíticos ocurre absolutamente lo mismo: la constancia es simplemente fundamental, dado que una vez los detenemos, es muy posible que la celulitis comience a aparecer de nuevo, con el tiempo.
En cualquier caso, a continuación te indicamos de forma muy resumida qué tratamientos y técnicas también pueden ser de enorme utilidad:
- Cremas o exfoliantes con cafeína. Algunos estudios han encontrado que la aplicación de cafeína soluble en agua dos veces al día presenta la capacidad de penetrar en el interior de la dermis, reduciendo la aparición de la celulitis en un plazo de 6 semanas. Al parecer, se cree que este compuesto ayudaría a la hora de mejorar el flujo sanguíneo presente en el área, así como a tensar la piel. Aunque, por el momento, no se comprende del todo el mecanismo exacto.
- Retinoides tópicos. Un estudio encontró que los retinoides, que son un activo derivado de la vitamina A, ayudarían a mejorar la apariencia de la celulitis, al aumentar el flujo sanguíneo y una mejor densidad de la piel.
- Drenaje linfático. Las técnicas de masaje linfático parecen ser increíblemente útiles y efectivas a la hora de reducir la apariencia de la celulitis. Así lo han demostrado distintos estudios científicos, en el que se observó que aplicar una estimulación linfática aumenta la circulación en todo el cuerpo, teniendo un efecto en distintas condiciones de la piel, incluyendo la celulitis.
Como vemos, una opción excelente y recomendada por la mayoría de expertos es intentar no solo seguir un tratamiento útil y adecuado durante un período de tiempo largo, y de manera constante, sino incluso combinarlos entre sí, lo que podría ayudar de forma muy positiva a la hora de conseguir unos mejores resultados.
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