Las leches vegetales son bebidas de origen vegetal que se elaboran a partir de frutos secos, semillas o cereales. Así, por ejemplo, mientras que la leche de sésamo se elabora a partir de sus semillas, la leche de almendras se prepara a partir de las almendras crudas o tostadas.
Son una opción nutricionalmente adecuada como alternativa a las leches con lactosa, cuya intolerancia –se cree- afecta a día de hoy a más del 70% de la población mundial. Se produce como consecuencia de un déficit de lactasa, cuya acción descompone la lactosa (el azúcar de la leche) en glucosa y galactosa para facilitar con ello su digestión. Por ello, cuando existe esta intolerancia la lactosa pasa por el intestino grueso sin descomponerse, y empieza a fermentar.
Si te encantan las avellanas tanto como a nosotros queremos explicarte a continuación cómo hacer leche de avellanas, con sus ingredientes y siguiendo los pasos oportunos y necesarios para prepararla en casa.
Ingredientes para hacer leche de avellanas
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200 gramos de avellanas crudas o tostadas (evitar fritas y sin sal)
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1 litro y medio de agua mineral
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1 pizca de vainilla
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Azúcar moreno o miel al gusto
Pasos para elaborar la leche de avellanas
Si vas a elaborar la leche vegetal con avellanas crudas es fundamental que durante la noche anterior al día de su preparación las mantengas en remojo con agua. Si optas por avellanas tostadas no es necesario seguir este paso.
Al día siguiente retira el agua y reserva las avellanas. Acláralas bien.
Durante varios minutos (nosotros recomendamos de 3 a 5) licua las avellanas hasta obtener un líquido cremoso, con apariencia de color blanco.
Cuela la bebida con ayuda de un colador o de una gasa de algodón.
Añade una pizca de vainilla y, en el momento de beber, sirve con azúcar o miel si deseas endulzarla.
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Imagen | MasonCooper
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