Cómo ayunar con consejos sencillos
El ayuno es una práctica en cierto sentido poco conocida en Occidente, aunque también es verdad que cada vez más muchas personas empiezan a conocer un poco sobre él, sobretodo con la llegada desde Oriente de algunas religiones o terapias que mantienen el ayuno como práctica saludable.
Aunque se trata de una opción practicada desde hace siglos por cristianos, judíos, hindúes, confucionistas o musulmanes, entre otros.
De hecho, el ayuno se convierte en la práctica imprescindible y característica en el Islam, el cual es llevado a cabo durante el mes del ramadán, consistiendo en el denominado como cuarto pilar del Islam.
Por estos motivos es considerada como una práctica religiosa, aunque lo cierto es que su práctica no tiene por qué estar relacionada con este ámbito. Más aún, desde el punto de vista tanto de la alimentación como de la salud, es una opción cuando la persona desea depurar su cuerpo.
¿Qué es el ayuno y en qué consiste?
El ayuno, desde un punto de vista de la alimentación, es una práctica consistente en dejar de comer de manera voluntaria con el fin de mejorar el estado de salud, ayudando a su vez a prevenir la aparición de diferentes enfermedades.
Consiste precisamente en eso: en dejar de comer de forma voluntaria durante un periodo de tiempo que nunca debe ser prolongado, sobretodo para no ocasionar graves consecuencias a nuestra salud. Es por ello por lo que el ayuno no debe ser confundido con la anorexia, un trastorno psicológico causado por el miedo a engordar.
¿Qué personas pueden ayunar?
Dado que durante el ayuno no se consume ningún alimento, no todas las personas pueden practicarlo.
Generalmente, sí pueden ayunar aquellas personas sanas que se encuentren en un estado óptimo de salud, y sobretodo que no tomen medicamentos.
En cualquier caso, te recomendamos que antes de ayunar le consultes a tu médico particular. Es siempre la mejor opción antes de evitar cualquier posible consecuencia grave.
¿Qué ocurre en el organismo durante el ayuno?
Un ayuno mantenido el tiempo debido, sin poner en riesgo nuestra salud, es capaz de ayudarnos a mejorar el estado de salud y prevenir la aparición de diversas enfermedades.
No en vano, durante el tiempo en que se practica nuestro organismo moviliza sus propias reservas de grasas para conseguir con ello la energía que necesita.
Fases del ayuno
Primera fase
Durante esta fase el cuerpo utiliza la glucosa y luego las reservas de glucógeno, que podemos encontrar tanto en el hígado como en los músculos.
Segunda fase
Esta fase empieza pasadas entre 24 y 48 horas, momento en el que el organismo pasa a obtener glucosa quemando reservas de grasas.
Debido a ello, es bastante posible que pueda producirse sudoración o mareos.
Tercera fase
Es una fase a la que los especialistas en salud no recomiendan en absoluto llegar. Es el momento en el que el organismo empieza a consumir las proteínas de los tejidos menos vitales.
Por este motivo, no debemos llegar a esta fase, ya que nuestra salud sí que correría peligro.
Algunos consejos antes de practicar el ayuno
No todas las personas pueden practicar el ayuno, ya que puede padecer diferentes enfermedades o patologías que en definitiva terminen por poner en riesgo su salud.
Es aconsejable pedir siempre consejo médico, y contar con su aprobación cuando desees practicarlo.
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