Cuando ocurre un hecho desafortunado en nuestras vidas, siempre lo solemos achacar nuestra mala suerte. Sin embargo, muchas veces no nos percatamos que el poder de cambiar las cosas si van mal, reside únicamente en nosotros mismos. ¿No os creéis esta premisa del todo?.
Lo cierto es que todos tenemos la capacidad de poder cambiar las cosas, especialmente cuando nos va mal. De la misma manera que también podemos ver las cosas de forma distinta cuando nos ocurre algo que en realidad no queríamos, ya sea porque no nos sale el plan que pensábamos, no alcanzamos nuestros objetivos, discutimos con alguien querido… Es posible cambiar de opinión y así tener una actitud mucho más positiva en la vida.
Tú tienes el poder de cambiar las cosas
Antes que nada, prueba
Son muchas las ocasiones que nos quejamos de nuestra propia situación alegando que siempre nos irá mal, hagamos lo que hagamos. De todos modos, ¿alguna vez os habéis preguntado qué pasaría si cambiaseis de ‘modus operandi’ antes de actuar? Quizás os llevéis una grata sorpresa ya que el resultado final puede cambiar radicalmente y en muchas ocasiones no tendréis que esforzaros mucho para conseguirlo.
Esto ocurre mucho con las relaciones personales, que se pueden convertir en un quebradero de cabeza si ambas partes no están dispuestas a “dar su brazo a torcer” por mero orgullo. Ante esta situación, lo mejor es que intentéis cambiar de comportamiento y seguro que veréis los resultados si de verdad la otra parte está dispuesta a hacer las paces con vosotros. A partir de ahí, ya puedes implementar la actitud del cambio a cualquier ámbito de vuestras vidas y seguro que a la larga os irá mejor.
Tú te conoces mejor que nadie
Aquí podríamos daros cientos de consejos sobre cómo debéis cambiar, pero la verdad que a nosotros nos parecerían contraproducentes. Nadie se conoce mejor que vosotros mismos y de ahí que sólo seáis vosotros los que sepáis mejor cuales son vuestras ventajas y desventajas como persona. Una vez las conozcáis en profundidad, ya podréis actuar en consecuencia y llevar a cabo cualquier cambio en vuestras vidas.
Como hemos explicado en anteriores artículos, no hace falta que desde un principio estos cambios sean radicales. Con que sean pequeños desde un primer momento, y sean siempre llevados a cabo desde un prima realista (conociendo tus puntos fuertes y débiles) esto os dará mucha más fuerza y energía para afrontar cualquier contratiempo en el futuro.
Nadie dijo que sería fácil
Ya hemos tomado la determinación de que el poder del cambio reside en nosotros mismos y por ello hemos decidido a tomar decisiones en nuestro día a día que nos ayuden a vivir mejor. Sin embargo, tenemos que deciros que al principio no será nada fácil. Se está muy cómodo en la zona de confort de cada uno y seguro que os da un poco de pereza salir de ahí.
Pero el que algo quiere de verdad, algo le cuesta. Nadie dijo que nada en esta vida sería fácil. Así que no nos queda más remedio que ser positivos y poner todas nuestras ganas en lo que estemos haciendo. El camino en sí será duro, pero una vez lleguemos a la “meta final” seguro que os daréis cuenta que todo el esfuerzo habrá merecido la pena, algo que os dará muchas más fuerzas para seguir adelante y afrontar futuros retos con mucho más optimismo.
Recuerda que vosotros sois los dueños de vuestras propias vida y ABSOLUTAMENTE nadie os debe decir cómo debéis actuar. Aunque esto no quiere decir que vuestros amigos o familiares más cercanos os pueden aconsejar o dar su propio punto de vista en un momento dado. Pero a la hora de la verdad, seréis vosotros únicamente los que vayáis a tomar esa decisión tan importante.
Por todo esto, os invitamos a que dejéis de lado el pesimismo en vuestras vidas y “cojáis el toro” por los cuernos a la hora de tomar decisiones. Tenéis que tener en cuenta que estamos en este mundo para primero ser felices y conseguir en parte que lo demás lo sean, algo que solo podemos con una actitud positiva en la vida que os ayudará a tener más autoestima y confianza en vosotros mismos.
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