En otoño arranca el frío y hay mayor riesgo a constiparnos. Para evitarlo deberemos nutrirnos con los mejores alimentos y siempre si son de temporada. Las frutas acaban siendo fuentes de salud gracias a las vitaminas y minerales que conllevan. Una gran parte de ellas nos pueden prevenir de sufrir determinadas enfermedades relacionadas con el frío.
Ahora bien, no quedan exentas de otras épocas del año, pues debemos comer siempre frutas acompañadas de verduras con el fin de tener una dieta del todo saludable. Algunos estudios establecen que cada año podrían salvarse 1,7 millones de vidas si se aumentara más el consumo de frutas y verduras.
Beneficios de las frutas de otoño
En líneas generales, comprar frutas de temporada es beneficioso porque son más frescas al haber sido cogidas al momento. Son antioxidantes, aportan fibra y regulan el intestino, también rebajan el colesterol malo y previenen ante cualquier posible riesgo a padecer enfermedades que están relacionadas con el corazón.
Permiten comerse de aperitivo, de desayuno, mezcladas en ensaladas o pastas, de postre como ya es más tradicional o acompañando a platos algo más contundentes como carnes o pescado a modo de salsa para romper el sabor más salado de tales alimentos.
¿Cuáles son las frutas de estos meses?
Uva
Una de las frutas más apreciadas del otoño es la uva. Tras la recogida de la vid y la época de vendimia, la uva está en todas las mesas, ya sea en forma de vino o en racimos, sean blancos o negro.
Por suerte, la uva tiene muchas propiedades nutricionales, puesto que presenta un alto contenido en hidratos de carbono, también aporta potasio, magnesio y calcio, y vitaminas del tipo B, entre muchas otras. Contiene antioxidantes, por lo que la uva es buena para proteger la pie y evitar así el envejecimiento.
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Naranja
Para prevenir el resfriado de pequeños nos daban naranjas, especialmente los zumos naturales de ellas. Ahora la cosa no ha cambiado tanto porque siguen teniendo una importante cantidad de vitamina C ideal para esta época del año, al aumentar nuestra energía y cuidar de nuestro interior. A su vez, presenta fibra y tiene minerales como el potasio, magnesio y fósforo.
Manzana
Es una fruta tradicional que podemos comer durante todo el año. La manzana nos aporta bienestar y salud, por lo que es una fruta realmente completa, que gusta a grandes y a pequeños y nos protege de muchas enfermedades.
Es también hidratante, ayuda a limpiar los dientes y a mantenerlos sanos y también tiene una gran cantidad de fibra. Presenta aminoácidos esenciales como la cistina, entre otros minerales y vitaminas. Puede comerse con la piel entera, asada al horno y hasta hacer purés o compotas de manzana con el fin de obtener un postre rico y altamente saludable.
Granada
Hay muchas frutas que consumir y compartir durante el otoño. Además de las que todavía están del verano como el melón y la sandía que cuenta con una gran parte de agua para beneficiarnos de su hidratación, la granada es singular en esta época del año.
Esta fruta tiene altas propiedades nutricionales porque es astringente por contener taninos, y contiene ciertos minerales con la abundancia de potasio. Entre las vitaminas, podemos nombrar la C y B.
Kiwi
Esta fruta también es encontrada ya durante todo el año en diversidad de establecimientos. Una de las sus propiedades es que tiene un alto contenido en fibra y eso ayuda a controlar la digestión.
De hecho, muchas personas consumen kiwi para el desayuno para regular sus procesos intestinales. También contiene vitamina C que va bien para esta época del año y los corrientes de aire, además de los minerales en buena proporción de magnesio y calcio.
Pera
Junto a la manzana, también es una fruta convencional que llena nuestros campos. Hay diversidad de tipos de peras, y cada una está muy buena y surge en diversas estaciones del año.
Además de la fibra que ofrece, también cabe destacar los flavonoides, compuestos con carácter antioxidante, además de los minerales que tiene la pera, con preferencia por el yodo, el magnesio y el potasio.
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