Ahora que nos encontramos en otoño ya es posible empezar a disfrutar de los maravillosos caquis, una fruta exquisita y deliciosa originaria de Japón, y que también es conocida habitualmente con el nombre de palosanto. Es una fruta fácilmente distinguible por su apariencia y color, y con ella vamos hoy a aprender a preparar una exquisita confitura de caqui, lo que nos brindará la posibilidad de poder disfrutarlo durante prácticamente todo el año.
Lo cierto es que la forma o apariencia del caqui recuerda mucho a la forma que presenta el tomate grande, aunque a diferencia de éste, tiende a ser de color anaranjado. Cuando se encuentra verde tiende a tener un sabor agridulce y al moderlo y masticarlo puede resultar bastante desagradable, por lo que lo más adecuado es tratar de consumirlo siempre maduro.
Eso sí, al estar maduro debemos tener bastante cuidado cuando lo manipulamos, puesto que tiende a ser muy sensible a los golpes.
Aunque en su versión entera y madura podemos disfrutarlo durante los meses de otoño e invierno, por suerte, con su pulpa podemos aprender a elaborar exquisitas mermeladas y confituras. ¿Quieres saber cómo? Te explicamos qué ingredientes necesitas y los pasos a seguir. Toma nota.
Ingredientes
- 1 kg de caquis maduros
- 800 g de azúcar
- 1 cucharadita de zumo de limón
- 1 vaso de zumo de caqui
- Espesante
Cómo preparar la confitura de caqui
- En primer lugar lava bien los caquis. Pon agua en una cazuela y escáldalos en agua hirviendo. Una vez escaldados retira del fuego y, cuando los caquis estén fríos, pélalos. Pica la pulpa bien, reservando el zumo (que es el que usaremos después).
- En una cazuela ideal para confituras o mermeladas pon el azúcar y el zumo de caqui. Cuece hasta que alcance el punto de bola.
- Una vez adquiera punto de bola incorpora la pulpa troceada de los caquis y el espesante.
- Lleva a ebullición y cuece, removiendo de vez en cuando con la ayuda de una cuchara de madera. Verifica la consistencia de vez en cuando.
- Cuando la confitura haya adquirido la consistencia deseada espuma al final de la cocción con la ayuda de una espumadera.
- Para terminar, pon la confitura en frascos de cristal con cierre hermético hasta casi el borde, cierra la tapa y colócalos boca abajo hasta que se enfríen. Finalmente, una vez fríos, ponles una etiqueta con las fechas de envasado.
¿Por qué es fundamental poner la etiqueta con la fecha de envasado a los botes de mermeladas y confitura caseras?
Probablemente te sorprenda descubrir por qué en cada una de nuestras recetas de mermeladas o confituras te recomendamos añadir una etiqueta con la fecha de envasado de la mermelada o confitura que hayas preparado en casa, y colocarla luego en los botes o frascos.
Es algo fundamental e imprescindible, ya que de esta forma sabremos en todo momento cuál ha sido la fecha de elaboración/envasado de la mermelada o confitura que tenemos entre las manos, y conoceremos si han pasado muchos meses o no desde su preparación.
Aunque como te explicábamos en el artículo ¿Las mermeladas y conservas caducan?, no suele ser habitual que se estropeen porque es ciertamente difícil que los patógenos puedan sobrevivir en un ambiente así (por su elevado contenido en azúcar, que a la vez sirve de conservante). Pero esto no significa que su sabor cambie un poco. No obstante, las mermeladas y conservas nunca suelen caducar.
Imágenes | Istockphoto
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