Si tienes un niño pequeño es bastante probable que ya hayas oído hablar sobre ella. O que, incluso, te hayas acercado a alguna farmacia cercana con el objetivo de comprarla. Y, también es posible que te hayas encontrado con la sorpresa de que al ir a buscarla no estuviera disponible. Efectivamente, te estamos hablando de Bexsero, la única vacuna que existe disponible hasta el momento contra el Meningicoco B (o, lo que es lo mismo, la bacteria causante de la meningitis B).
Sin embargo, a pesar de los problemas de desabastecimiento de los últimos meses, incluso con listas de espera de decenas de personas en muchas farmacias, a día de escribir el presente artículo que lees (con fecha 26 de abril), la empresa desarrolladora de la vacuna ha indicado que ha vuelto a estar disponible.
En cualquier caso, se trata como de buen seguro sabrás ya a estas alturas, de una vacuna que no se encuentra incluía en el calendario de vacunas del sistema público sanitario español, al contrario de lo que sí ocurre -por ejemplo- con la vacuna contra la meningitis C.
¿Qué es Bexsero? ¿Para qué sirve?
Aunque Bexsero es puramente su nombre comercial, nos encontramos ante una vacuna cuya función principal es la de conseguir la inmunización frente al meningicoco b, un tipo de bacteria que como conoceremos en un apartado próximo, puede causar una infección generalizada (sepsis) o infecciones de las meninges.
¿Qué es el meningicoco?
El meningicoco es un microbio, concretamente una bacteria, que causa infecciones poco frecuentes pero graves, como por ejemplo es el caso tanto de meningitis como de sepsis (infección de la sangre).
Este microbio vive habitualmente durante temporadas en la garganta y en la nariz de adolescentes y jóvenes sanos, sin prácticamente producir ningún daño, siendo considerados como portadores asintomáticos.
Sin embargo, los casos más frecuentes se producen en niños pequeños y adolescentes.
Estas infecciones pueden dejar graves secuelas, o conducir a la muerte en caso de que no sea tratada precozmente.
¿En qué consiste la meningitis B? ¿Es de verdad tan grave?
La meningitis de tipo B, también conocida médicamente con el nombre de meningitis meningocócica, es un tipo de infección bacteriana grave que afecta a las membranas que rodean al cerebro y a la médula espinal.
Es decir, causa una inflamación -de aparición rápida- de las distintas capas que cubren tanto el encéfalo como la médula espinal (meninges), así como el espacio que contiene el líquido localizado entre las propias meninges.
Se trata como vemos de una urgencia médica que debe ser tratada con antibióticos lo más pronto posible, dado que éstos tienden a ser eficaces cuando son administrados de forma precoz, lo que ayuda a reducir la inflamación del encéfalo.
De hecho, la gravedad ocurre cuando la sepsis se produce rápidamente y de forma extendida, no dando tiempo a aplicar el tratamiento antibiótico adecuado.
Como manifiestan muchos expertos, en realidad la meningitis de tipo B es bastante poco frecuente. No obstante, es cierto que la alarma ha cundido en los últimos meses a razón de los 48 casos que se han registrado en España a lo largo del último año, de acuerdo a datos suministrados por el Instituto de Salud Carlos III.
Se trata de una infección bacteriana que afecta especialmente a niños menores de 5 años y a personas mayores de 70 años de edad, con una tasa de mortalidad que ronda alrededor del 10%.
¿Qué hay que saber sobre la vacuna Bexsero?
Quién se debe vacunar del meningicoco b
La Asociación Española de Pediatría, a través del Comité Asesor de Vacunas, indica que la vacuna puede ponerse a cualquier edad a partir de los 2 meses de edad.
¿Cuáles son sus reacciones adversas?
Este es un tema que preocupa a muchísimos padres. Aunque es cierto que esta vacuna puede ocasionar una reacción adversa quizá un poco mayor en comparación con otras vacunas, las reacciones asociadas son en realidad leves.
De hecho, las más habituales son: dolor y enrojecimiento en el lugar de la inyección, fiebre e irritabilidad.
Cómo se administra
La vacuna se inyecta por vía intramuscular. En los niños de hasta 1 y 2 años es preferible su administración en el muslo, y en el hombro a partir de los 2 años.
Cuántas dosis son necesarias
El número de dosis a administrar depende directamente de la edad en la que se comience con la vacunación:
- Lactantes de 2 a 5 meses: 3 dosis de inmunización primaria y 1 dosis de refuerzo entre los 12 y 15 meses.
- Lactantes no vacunados de 6 a 11 meses: 2 dosis de inmunización primaria y 1 dosis de refuerzo.
- Lactantes no vacunados de 12 a 23 meses: 2 dosis de inmunización primaria y 1 dosis de refuerzo.
- Niños de 2 a 10 años: 2 dosis (no se requiere dosis de refuerzo).
- Niños desde los 11 años de edad, adolescentes y adultos: 2 dosis (no se requiere dosis de refuerzo).
¿Es eficaz?
La protección general de la vacuna oscila en torno a un 70%, mientras que su eficacia al proteger contra tres de las cuatro variantes del meningicoco es de más del 90%.
¿Es recomendable poner la vacuna de Bexsero al niño?
Por un lado nos encontramos con la opinión del Ministerio de Sanidad, que considera que la vacuna Bexsero está en realidad recomendada para unos pocos casos en concreto: cuando existe asplenia (esto es, falta de bazo o éste no funciona adecuadamente), en caso de complicaciones poco frecuentes, cuando se produce algún brote, o en personas que manejan la bacteria.
Es decir, consideran que al ser una vacuna de reciente aparición podría presentar efectos adversos inesperados, y que hasta el año (momento de aparición del fármaco) la meningitis b no era un problema de salud, ni de hecho lo es en la actualidad.
Por otro lado, la Asociación Española de Pediatría es una de las principales defensores de esta vacuna, ya que aunque efectivamente se trata de una infección poco frecuente, la vacuna no ha tenido efectos adversos importantes, y ayudaría a evitar las complicaciones propias de la meningitis b.
Entonces, ¿qué hacer como padre y madre?
Probablemente te hayas encontrado con la sorpresa de que algún pediatra te aconseje la vacunación contra la meningitis B, y sin embargo algún otro especialista te dé la opinión contraria.
En este caso, como vemos, la decisión de vacunar o no al niño es de cada madre y padre, dado que nos encontramos ante un tipo de vacunación que es opcional. Como opina Armando Bastida en el formidable blog de Bebés y Mamás, «aunque podría decirse que estadísticamente es casi imposible que nuestro hijo coja nunca una meningitis B, sin embargo no es imposible, y la enfermedad es grave».
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