Aunque es cierto que, tal y como indican muchos especialistas, el estrés se convirtió en la antigüedad en una auténtica ventaja que permitía a nuestros antepasados alejarse del peligro y sobrevivir, en la actualidad la realidad es que se ha convertido en un auténtico problema de salud para muchísimas personas.
De hecho sólo deberíamos prestar atención a las principales consecuencias del estrés en la salud para darnos cuenta de en qué manera tan negativa puede influir en nuestra salud: problemas cardiovasculares (hipertensión arterial, aumento del riesgo de ataque cardíaco, taquicardia…), nuestras defensas disminuyen frente a infecciones, debilidad y bajo estado anímico…
Eso sí, no debemos confundir el denominado como estrés postvacacional (que aparece cuando terminan las vacaciones, generalmente de verano, y nos sentimos estresados por la vuelta al trabajo o a las clases), con el estrés diario que tienden a sentir muchas personas cada día.
Eliminar el estrés
A la hora de proponernos la eliminación del estrés debemos tener presente y tratar de averiguar qué es lo que nos produce estrés. Es decir, puede deberse a que cada día hacemos –o pretendemos hacer- tantas cosas que ni nuestro tiempo ni nuestro cuerpo dan para más. En estos casos sí es habitual sentir estrés, porque es una forma que tiene nuestro organismo para indicarnos que no podemos más y que necesitamos evitar tanto sobreesfuerzo.
También es posible que el estrés aparezca por una situación que nos preocupa, ya sea en el presente o bien incluso por una situación futura que creemos que va a pasar, de forma que se genera una sensación en nuestro cuerpo que nos activa, pero que si no la controlamos o no solucionamos aquello que nos preocupa terminará por convertirse en crónica.
Cómo eliminar el estrés
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Organiza tu día a día: suele ayudar muchísimo cuando el estrés es debido a los diferentes quehaceres que realizamos cada día, en especial cuando son muchísimos y ni nuestro tiempo ni nuestro cuerpo dan para más.
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Aleja tus preocupaciones y pensamientos negativos: si sientes que ese estrés que puedes sentir es debido a determinadas preocupaciones o aparece incluso por la presencia continua o repetida de pensamientos negativos, lo mejor es solucionar esas preocupaciones ocupándonos de ellas.
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Disfruta de una buena infusión relajante: las infusiones relajantes son bebidas sanas completa y totalmente naturales que contienen beneficios y propiedades relajantes, ideales para cuando nos sentimos nerviosos, estresados o ansiosos. Destacan especialmente la infusión de tila, melisa, espino albar y pasiflora.
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Practica la relajación cada día: para ello es necesario aprender a relajarse, aunque en la mayoría de las ocasiones basta con acostarnos en un lugar cómodo sin ruido externo ni nadie que nos moleste y tratar de mantener una respiración pausada y relajada. ¿Lo mejor? Inspirar durante 4 o 5 segundos y espirar durante el mismo tiempo, durante al menos 30 minutos, mientras sientes que tu cuerpo se relaja.
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Busca ayuda: si sientes que por ti mismo/a no puedes superar ese estrés que puedes sentir cada día, lo mejor es buscar ayuda psicológica a partir de un especialista que te indicará técnicas útiles para eliminar el estrés, a la vez que te ayudará a solucionar los posibles problemas y preocupaciones que puedan influir en su aparición.
Imagen | Moyan_Brenn
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