No hay duda que si pensamos en postres o dulces típicos sumamente característicos de la Navidad, los polvorones se convierten en uno de los más populares. Al igual que ocurre con los mazapanes, ese delicioso dulce elaborado a base de almendra molida y azúcar, cuyas figuritas tanto gustan durante esta maravillosa época del año.
Se trata de un producto típico de la repostería navideña, que destaca sobre todo por ser tremendamente popular en España, siendo muy conocidos los que se elaboran cada año en Andalucía (en Estepa y Fondón), en Castilla y León (Tordesillas) y en Navarra (Pitillas).
Como de buen seguro sabrás, el polvorón es una especie de torta de tamaño pequeño, elaborado con harina, manteca y azúcar, que se cuece al horno generalmente a una temperatura fuerte, y que tiene la particularidad de deshacerse en polvo cuando lo mordemos.
No obstante, aunque tradicionalmente se elabora con manteca de cerdo, este ingrediente impide en que una persona vegana o que simplemente no consuma alimentos de origen animal, pueda no comerlo durante las Navidades.
Si este es tu caso, te proponemos una receta vegana ideal para preparar tus polvorones caseros sin ningún ingrediente que provenga de animales. El resultado probablemente te sorprenderá. ¿Te animas a prepararlos con nosotros?.
Receta vegana de polvorones navideños
Ingredientes:
- 550 gr de harina tostada
- 250 gr de azúcar
- 75 gr de vino blanco
- 70 gr de aguardiente seco
- 200 gr de aceite de oliva virgen extra
- 1 cucharadita de canela molida
- 1 limón
- 60 gr de zumo de naranja
- 2 cucharaditas de esencia de limón
- Azúcar glas
Cómo elaborar polvorones veganos:
- Tostar la harina en una sartén: En primer lugar vamos a tostar la harina. Para ello solo tienes que ponerla en una sartén y dejarla calentar durante unos minutos, removiéndola con ayuda de una cuchara de madera. Hasta que observes que se haya tostado por completo. Luego deja que se enfríe, y luego resérvala en un tarro de cristal.
- Tostar la harina en el horno: También puedes optar por tostar la harina en el horno. Para ello solo tienes que poner la harina en una bandeja de horno y extenderla bien. Introduce la bandeja en el horno y calienta a 150ºC de temperatura. Remuévela de vez en cuando, de esta forma conseguirás que vaya perdiendo humedad. Cuando coja color retira del horno, deja enfriar y una vez frío pasa por un colador.
- Obtén la corteza de un limón y ponla en una sartén al fuego con el aceite de oliva. Tuesta el aceite un poco pero sin dejar que la corteza se queme.
- En un cuenco grande pon el azúcar, el jugo de naranja, la esencia de limón, el vino blanco, el aguardiente, el aceite de oliva frito y la canela molida. Mézclalo todo bien con ayuda de unas varillas.
- Ahora echa la harina tostada y amasa con las manos. Obtendrás una crema más o menos grasienta. Deja que se repose durante 1 o 2 horas.
- Luego coge trozos de masa y aplánalas con las manos. Finalmente dales forma de tortas redondas y gruesas (puedes utilizar un corta pasta si prefieres).
- Coloca la masa cortada en la bandeja de horno, coloca la bandeja a segunda altura y hornea con el gratinador activado a 200ºC de temperatura durante 15 a 20 minutos.
- Cuando estén listos retira del horno y deja que se enfríen.
- Una vez fríos añade abundante azúcar glas por encima.
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