En un post anterior hemos facilitado información acerca de cómo prevenir la gripe estacional así como las recomendaciones de la OMS y el Ministerio de Sanidad, ambos organismos consideran la vacunación de la gripe estacional anual como la prevención más eficaz.
La gripe estacional puede afectar gravemente a cualquier persona o a cualquier grupo de edad y si acaso nos vemos en la situación de que la gripe ya nos ha pillado quizás te hagas la siguiente pregunta: ¿qué hacer cuando la gripe ya nos hemos contagiado y los primeros síntomas comienzan a aparecer?.
Si la gripe ya nos ha pillado es conveniente saber que lo medicamentos no curan solo contribuyen a calmar o aliviar los síntomas, y en estos casos al tratarse de un virus los antibióticos no debemos tomarlos y menos sin prescripción médica.
Debemos prestar atención a algunos síntomas que pudieran surgir y alertarnos
- Fiebre alta cuando se superan los 40,5 grados en los adultos, ancianos y niños.
- En el caso de los bebés de 3 a 24 meses cuando la temperatura supera los 39,5.
- En el caso de los bebés de 0 a 3 meses cuando presenta temperatura rectal de más de 38ºC.
En algunos casos la gripe puede cursar con algunas complicaciones más graves que suelen ser por afecciones respiratorias como es el caso de la pulmonía.
Esta afección puede darse en las personas mayores, personas con las defensas débiles, y en niños pequeños.
¿Y cómo recuperarnos?
El descanso es uno de los mejores remedios, y el cuerpo por sí mismo nos lo va a pedir ya que uno de los primeros síntomas es el cansancio debido a que la gripe debilita el organismo por lo que lo aconsejable es quedarse en casa y reposar.
Además del reposo hay que hidratarse bien, beber muchos líquidos, como agua, zumos de frutas naturales ricos en vitamina C, como de naranja, de pomelo, de uvas, infusiones que nos ayuden a reforzar nuestras defensas como el boldo, té de saúco, jengibre para aliviar los síntomas gripales, y consumir alimentos ligeros, fáciles de digerir como los purés, cremas, caldos, y también consumir frutas ricas en vitamina C como la naranja, mandarinas, kiwi, piña, uvas.
Si tenemos fiebre no debemos abrigarnos en exceso ya que el cuerpo necesita refrigerarse.
Los síntomas de la gripe suelen durar una semana siempre y cuando no surjan complicaciones. Es posible que aunque hayamos pasado una gripe pudiéramos volver a pasar otra nuevamente y esto en ocasiones puede llegar a suceder porque hay varios tipos de virus circulando al mismo tiempo.
Si después de haberte vacunado resulta que te has resfriado es probable que ya estuvieras incubando algún resfriado o catarro.
Muchas personas llegan a pensar que por haberse vacunado han enfermado, esto suele ser así porque creen que la propia vacuna les ha desarrollado la enfermedad, lo que es totalmente imposible ya que estas vacunas no contienen microorganismos.
La vacuna de la gripe estacional aunque es el método más eficaz frente a la prevención no llega a protegernos en un 100% pero sí contribuye a reducir los síntomas sobre todo a evitar las posibles complicaciones que pueden llegar a afectar al grupo de población denominado de alto riesgo.
Con la vacuna de la gripe estacional también se previene que la enfermedad se extienda y se contagie hasta el punto de llegar a convertirse en una epidemia.
Muchas personas no son conscientes de que una simple gripe puede llegar a complicarse y tener consecuencias serias sino actuamos a tiempo.
Por eso es conveniente llevar a cabo unos hábitos de vida saludables en los que la alimentación sea sana, equilibrada y en la que la actividad física moderada no debe faltar, hábitos de higiene tanto corporal como en el hogar, cuidarnos durante todo el año conseguiremos fortalecer nuestras defensas y estar en forma para prevenir en lo posible que la gripe haga su aparición.
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