Con la llegada del frío, y sobretodo tanto del otoño como del invierno, es bastante habitual que, cada año, muchas personas tiendan a enfermarse de la denominada como gripe estacional, a la vez que de muchos resfriados o trastornos respiratorios varios.
El cambio de tiempo, unido al cambio de estación y el paso especialmente de un tiempo caluroso (como es el verano) a un tiempo muchísimo más frío (como es el otoño y el invierno), causa una rebaja en las defensas, motivo por el cual es aconsejable conocer cómo aumentar las defensas de manera natural.
Aunque es cierto que la mayoría de las infecciones respiratorias que se producen en invierno suelen tener una resolución sin problemas, en determinadas ocasiones se hace preciso que la persona deba guardar cama durante varios días o incluso algunas semanas, lo que a su vez ayuda al organismo a que se recupere como es debido.
Para estos casos, es recomendable conocer algunos consejos útiles que te ayudarán en estos momentos.
Consejos útiles a la hora de guardar cama
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Ventila la habitación: Es fundamental para que el aire de tu habitación se renueve, y a la vez se eliminen gérmenes y virus. Trata de ventilar la habitación al menos dos veces cada día.
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Ventila el colchón: Es común que, cuando estamos enfermos de gripe o resfriados y nos acompaña la fiebre, tendamos a sudar mucho. Esto es muy positivo, pero es imprescindible ventilar el colchón cambiando las sábanas.
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Cambia las sábanas: La fiebre y el sudor hace que las sábanas de nuestra cama se ensucien más rápido. Es conveniente que las cambies de vez en cuando, ya que la percepción de descansar en unas sábanas limpias te ayudará a eliminar el virus más rápidamente (el humor de la persona cambia).
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Dale la vuelta al colchón: Esto es aconsejable una vez la persona ya se ha puesto buena y no está enferma. Permitirá favorecer la correcta aireación del mismo.
Imagen | revenante
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