Los riñones son órganos imprescindibles para la vida ya que si no los tuviéramos nuestro organismo no podría funcionar al 100%. Tan importante es tenerlos como que tengamos unos riñones saludables ya que en ello nos va la vida. Cuando los riñones sufren algún deterioro en su salud y ya no funcionan bien tanto nuestra salud como nuestra calidad de vida se ven bastante mermadas.
Los riñones se encargan de filtrar la sangre y depurarla, en este proceso retienen las sustancias que nuestro organismo necesita para funcionar bien y deshecha lo que nuestro cuerpo no necesita a través de la orina. Son por tanto órganos importantes a la hora de depurar y liberar al organismo de toxinas o desechos que el organismo no necesita.
Otra de las funciones de los riñones es regular la tensión arterial del cuerpo, el equilibrio hidrosalino y también se encargan de estimular la producción de los glóbulos rojos en la sangre.
Cuando los riñones se enferman y no son capaces de llevar a cabo sus funciones tenemos que depender de una máquina que haga la función de los riñones, en este caso estaríamos hablando de una máquina de diálisis, esta máquina se encargaría de depurar la sangre de nuestro organismo cuando los riñones ya no funcionan.
Por tanto los riñones debemos cuidarlos a lo largo de toda nuestra vida, cuidándolos contribuiremos sin lugar a dudas a tener unos riñones saludables.
Para tener unos riñones saludables la dieta que llevemos a lo largo de nuestra vida es fundamental por lo que debemos cuidarla llevando a cabo una dieta sana y equilibrada en la que reduzcamos el consumo de sal, nos hidratemos bien bebiendo de 1,5 litros a 2 litros de agua al día, y que la dieta sea rica en verduras, hortalizas y frutas frescas.
Además de cuidarlos con la dieta, los riñones necesitan que los refresquemos o depuremos al menos una vez al año, y para eso podemos recurrir a los remedios naturales que a continuación facilitamos con los que contribuiremos a su mejor funcionamiento ya que contienen propiedades tanto diuréticas como depurativas.
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Los remedios naturales consisten en preparar infusiones con las propiedades anteriormente citadas, jugos naturales de verduras, hortalizas y frutas que contienen las mismas propiedades.
Conoce los remedios naturales para refrescar los riñones
Infusión de alcachofas de cardo
Ingredientes:
- 2 alcachofas.
- Medio litro de agua.
Elaboración:
En un caldero ponemos agua a calentar para cocinar las alcachofas.
Lavamos bien las alcachofas y las cocinamos hasta que estén bastante tiernas.
Retiramos del fuego y colamos la infusión.
Dejamos enfriar y la guardamos en la nevera.
De esta infusión tomaremos todos los días un vaso en ayunas para refrescar los riñones.
Infusión de berros
Ingredientes:
- 100 gramos de berros.
- Un litro de agua.
Elaboración:
Lavamos bien los berros y los escurrimos. En un caldero ponemos el agua a calentar para hacer la infusión de berros. Cuando el agua esté hirviendo añadimos los berros y los cocinamos 15 minutos.
Apagamos el fuego, tapamos el caldero y dejamos reposar unos 10 minutos. Destapamos la infusión, la colamos y dejamos que se enfríe. Reservamos la infusión en la nevera.
Para refrescar los riñones lo aconsejable es tomar la infusión de berros, 2 veces al día.
Infusión de rabitos de cerezas
Ingredientes:
- Una cucharada sopera de rabitos de cerezas.
- 200 ml. de agua o una taza de agua.
Elaboración:
Ponemos el agua en un cazo a hervir. Cuando esté hirviendo agregamos los rabitos de cerezas y mantenemos hirviendo durante unos 3 minutos.
Apagamos el fuego, tapamos la infusión y la dejamos reposar durante 10 minutos. Destapamos y colamos la infusión.
Esta infusión de rabitos de cerezas para refrescar los riñones es aconsejable tomarla en ayunas y durante 20 días.
Infusión de perejil
Ingredientes:
- Un buen manojo de perejil.
- Un litro de agua.
Elaboración:
Lavamos bien las ramas de perejil y escurrimos.
Ponemos el agua a hervir en un caldero y cuando comience a hervir añadimos las ramas de perejil. Dejamos hirviendo durante 3 minutos. Apagamos el fuego, tapamos la infusión y la dejamos reposar unos 10 minutos.
Destapamos la infusión y la colamos. Dejamos enfriar y la guardamos en la nevera. Podemos tomarla durante el día.
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Jugo de zanahoria, apio y piña
Ingredientes:
- Una zanahoria.
- Dos ramas de apio.
- 3 rodajas de piña al natural, en su jugo.
Elaboración:
Quitamos la piel a la zanahoria y la lavamos bien. Lavamos las ramas de apio.En la licuadora licuamos primero la zanahoria, luego el apio, y las ruedas de piña.
Mezclamos los tres jugos, removemos y tomaremos de este jugo un vaso todos los días en ayunas y durante una semana. Luego descansaremos y lo repetiremos al mes siguiente.
Licuado de espárragos y manzana
Ingredientes:
- 3 espárragos.
- Una manzana.
Elaboración:
En la licuadora licuamos el jugo de los espárragos. Lavamos la manzana, la pelamos y la cortamos en trozos.
Vamos licuando las manzanas. Una vez obtenidos los dos jugos, los mezclamos y ya podemos beberlo.
De este jugo para refrescar los riñones es aconsejable tomar un vaso al día durante una semana. Luego descansar y volver a repetirlo al siguiente mes.
Jugo de arándanos
Rico en antioxidantes que nos ayudarán a luchar contra los radicales libres y a eliminar el ácido úrico, también a refrescar o limpiar los riñones.
Ingredientes:
- Un buen puñado de arándanos.
- Un litro de agua.
Elaboración:
Lavamos bien los arándanos y los dejamos escurrir. Ponemos los arándanos en el vaso de la batidora y añadimos el agua para batir. Colamos el jugo y lo reservamos en la nevera. De este jugo podemos tomar un vaso al día preferentemente en ayunas.
Jugo de uvas rojas
Ingredientes:
- 250 gramos de uvas.
- Un litro de agua.
Elaboración:
Lavamos las uvas y las escurrimos. Ponemos las uvas en el vaso de la batidora y agregamos el agua para batir todo junto. Una vez batido, colamos el jugo y lo guardamos en la nevera.
Para refrescar los riñones es aconsejable beber un vaso de este jugo todos los días en ayunas.
De estos remedios naturales podrás escoger el que más te guste para refrescar los riñones e incluso puedes combinarlos para que así puedas variarlos y cambiar los sabores.
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