La orina consiste en un líquido compuesto principalmente por agua y por distintas sustancias que nuestro organismo separa con el fin de eliminarlas de nuestro cuerpo a través de la micción. Es producida por nuestros riñones, los cuales son precisamente los encargados de filtrar diferentes desechos (conocidos con el nombre de urea) y el exceso de agua de nuestra sangre. Desde los riñones esta orina llega por dos tubos delgados conocidos como uréteres hasta la vejiga, donde es almacenada hasta que comenzamos a tener ganas de ir al baño.
Dado que la vejiga tiene en realidad poca capacidad de almacenamiento, no es adecuado aguantarse las gañas de ir al baño, puesto que si se trata de un hábito regular la vejiga tiende a ensancharse y agrandarse, se pueden producir infecciones de orina, reflujo vesicoureteral, escalofríos y dolores pélvicos. Por ello la vejiga se agranda o hincha cuando se encuentra llena de orina, y vuelve a hacerse más pequeña cuando está vacía.
Al momento de orinar pueden producirse diferentes problemas al momento de miccionar. Entre las causas más comunes podemos mencionar los siguientes: infecciones del tracto urinario, insuficiencia renal, agrandamiento de la próstata, problemas con el control de la vejiga (como cistitis intersticial, incontinencia urinaria o vejiga hiperactiva), o bien la posible existencia de una obstrucción que no permita a la vejiga su correcto vaciado.
Sea como fuere, lo cierto es que el color de la orina puede decirnos mucho acerca de nuestro estado de salud, dado que su variación tanto en el color como en el olor es un indicativo de la existencia de algún problema urinario o de salud.
¿Cuál es el color normal de la orina?
Normalmente el color de la orina es amarillo pálido. Y se convierte en un indicativo claro del grado de hidratación de nuestro organismo. Esto se traduce en que cuanto más clara sea a orina mejor hidratados nos encontramos, de manera que tener una orina amarilla pálida y limpia es una buena señal que nos indica que en realidad nos estamos hidratando de manera correcta y adecuada.
Pero debemos tener cierto cuidado, dado que una orina muy transparente puede ser un indicativo de que la persona sufre una diabetes insípida, la cual surge cuando los riñones son incapaces de evitar la correcta eliminación del agua. En estos casos es común que la persona llegue a orinar más de cinco litros al día.
Los colores anormales de la orina
Siempre que vamos al baño a orinar debemos prestar atención al color de la orina, para asegurarnos de que nos encontramos ante un tono adecuado y saludable, o bien si estamos ante una señal de que nuestro organismo no se encuentra del todo bien:
- Color de orina rojo: una orina teñida de rojo es un motivo de alarma porque puede indicar la presencia de sangre en la orina, ya sea por un problema en la próstata o en los riñones, o en casos más graves por la presencia de un tumor en la vejiga. No obstante, también debemos prestar atención a lo que hemos comido o bebido antes de orinar, puesto que alimentos como los frutos rojos, arándanos, tunos rojos, remolacha o ruibarbo pueden ser una causa de orina de tono rojizo o rosáceo. La clave está en tener presente si hemos comido algunos de estos alimentos, y si el color de la orina vuelve a su normalidad después de continuar miccionando varias veces.
- Color de orina turbia o blanca: puede ser un indicativo de la presencia de una infección bacteriana. En hombres este color puede ser común cuando sufren de eyaculación retrógrada (cuando eyaculan y el semen sale hacia la uretra en lugar de hacia fuera).
- Color de orina morado: aunque es un tono de color de orina bastante infrecuente, lo cierto es que puede ser un indicativo de que la persona sufre de una enfermedad genética conocida con el nombre de porfiria, causado por un exceso de producción de hemo, una sustancia con pigmentación morada que ayuda al transporte de oxígeno por nuestro cuerpo.
- Color de orina anaranjado o amarillo oscuro: puede ser causada por el consumo de vitaminas del grupo B o carotenos, medicamentos utilizados para el tratamiento de infecciones urinarias o por laxantes.
- Color de orina marrón: puede ser producida por un consumo regular de laxantes (en cuya composición encontramos senna), o por haber comido demasiadas habas. No obstante, si la orina presenta tono marrón con restos fecales puede ser un indicativo de que existe comunicación entre la vejiga y el intestino, como consecuencia de una fístula vesicointestinal.
- Color de orina verde azulado: aunque se trata de un tipo de orina raro es posible que aparezca por el consumo de algunos medicamentos por ejemplo para el tratamiento de la enfermedad de Parkinson o antidepresivos, sobre todo si se componen de un compuesto conocido como fenol.
Como vemos, debemos prestar atención a nuestra orina para estar seguros de si nos estamos hidratando correctamente, o para comprobar si tal vez podríamos estar sufriendo alguna determinada afección o problema de salud. En caso de que el color de la orina cambie y no sea debido al consumo de medicamentos o determinados alimentos o bebidas debemos acudir a nuestro médico, especialmente cuando este color anormal de la orina no desaparece con las horas.
Comentar