La diarrea es considerada como una alteración de los intestinos caracterizada por una mayor fluidez, frecuencia y volumen de las deposiciones. Es decir, supone un aumento en la frecuencia de las deposiciones, siendo de más de tres o cuatro al día. A su vez, este aumento se ve acompañado de una disminución de su consistencia, tornándose sobre todo muy líquidas.
La principal causa que ocasiona la aparición de diarreas tanto en adultos como en niños es debido a un proceso infeccioso adquirido a partir de una intoxicación alimentaria, así como la infección por determinados virus. Entre estos virus de estómago podemos mencionar los principales causantes de gastroenteritis, como es el caso de astrovirus, adenovirus entérico, rotavirus y norovirus. En la mayoría de los casos estos virus se encuentran en alimentos o agua potable contaminados, y se caracterizan especialmente por su facilidad de contagio.
No obstante, también existen otras causas relacionadas que provocan la aparición de diarreas. Por ejemplo, distintas enfermedades inflamatorias del intestino (como es el caso del síndrome del intestino irritable o la enfermedad de Crohn), la insuficiencia del páncreas o determinadas tensiones emocionales que causan ansiedad y estrés.
¿Cuáles son los síntomas de la diarrea?
Evidentemente, el primer síntoma característico es el aumento en el número de deposiciones así como la propia disminución de la consistencia. Este aumento supone que la persona afectada tiende a evacuar al baño y realizar más de 3 deposiciones al día, y en lo que se refiere a la disminución de su consistencia es debido a que principalmente estas deposiciones son sobre todo líquidas o muy blandas.
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Cuando existe diarrea también es común que se acompañe de otros síntomas relacionados, como por ejemplo: febrícula o fiebre, náuseas, vómitos, dolor abdominal de tipo cólico e intolerancia a la comida. Son habituales los escalofríos, el dolor muscular y cierta sudoración excesiva.
¿Qué comer si tengo diarrea?
En caso de diarrea es fundamental beber líquidos abundantes, siempre tomándolos en pequeñas cantidades y dando muchos sorbos a lo largo del día. De esta forma aportaremos líquidos e hidrataremos nuestro organismo de forma correcta. En este sentido, puedes optar por agua con jugo de limón, infusiones, agua de arroz y agua de zanahoria.
El agua de arroz es probablemente uno de los remedios tradicionales más conocidos, probablemente porque son reconocidas sus cualidades astringentes útiles para aliviar y disminuir las diarreas gracias a su contenido en almidón, ayudando a su vez a normalizar el tránsito intestinal. Para prepararlo es tan sencillo como
Cómo hacer suero casero para aportar líquidos a nuestro organismo después de la diarrea
Ingredientes que necesitas:
- 1 litro de agua mineral natural
- 2 cucharadas soperas de azúcar
- Media cucharadita de sal
- Media cucharadita de bicarbonato de sodio
- 1 taza de jugo de limón
Preparación del suero casero:
Pon el litro de agua en una jarra de vidrio. Añade el azúcar, la sal y el bicarbonato de sodio en las cantidades indicadas. Luego parte un limón por la mitad, exprímelo para obtener su jugo y añádelo finalmente a la jarra. Para terminar, revuélvelo todo con ayuda de una cuchara larga de madera.
Este suero casero puedes reservarlo en la nevera, e irlo bebiendo sorbo a sorbo a lo largo del día.
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