Los chakras son centros psíquicos que se encuentran en el cuerpo físico por los que tiene que circular la energía. Estos centros psíquicos rigen varios aspectos de nuestra vida, haciendo que cualquier emoción o pensamiento turben o desestabilicen la energía que circula por ellos.
Los chakras se localizan desde el cóccix hasta la coronilla y se reparten en siete puntos diferentes de la anatomía del ser humano.
Cada uno de los siete chakras corresponde con una glándula endocrina que mencionaremos más adelante para localizar adecuadamente cada uno de ellos.
Cuando algún aspecto de nuestro ser relacionado con el chakra correspondiente está taponado o desestabilizado ese chakra deja de llevar y traer energía hacia los demás provocando una desconexión con los otros centros de energía.
La energía que fluye por ellos es continua y cuando fluye giran en sentido de las agujas del reloj, por lo que si giran en sentido contrario se dice que el chakra está cerrado y la energía no está fluyendo debidamente.
Cuando un chakra está cerrado la energía está obstruida y existe algún bloqueo relacionado con algún aspecto de la vida conectado con ese chakra.
Dónde encontramos los 7 chakras
-
Muladhara o chakra raíz: está conectado con las glándulas corticoadrenales y se localiza entre el ano y los genitales. El color adecuado para este chakra es el rojo y su elemento es la tierra. Se bloquea por el miedo, el miedo a lo que temes, hay que dejar que los miedos se muestren con nitidez.
-
Svadhisthana o chakra sacro: conectado con las glándulas suprarrenales y se localiza en el sacro. Su color es el naranja y el elemento es el agua. Lo bloquea la culpa, hay que saber perdonar.
-
Manipura o chakra del plexo solar: localizado dos dedos por encima del ombligo conectado con el bazo, el estómago y el hígado. El color que representa es el amarillo y el elemento es el fuego. Se bloque por la vergüenza.
-
Anahata o chakra del corazón: conectado con la glándula del timo y se localiza en el corazón. Su color es el verde, relacionado con los sentimientos del corazón y el elemento correspondiente es el aire. Se bloque por el dolor.
-
Vishuddha o chakra de la garganta: relacionado con la glándula tiroidea, se localiza en la garganta, relacionado con la comunicación. El color que le corresponde es el azul, relacionado con la comunicación y su elemento es el éter.
-
Ajna o chakra del tercer ojo: la glándula relacionada es la pituitaria, y se localiza entre los dos ojos. El color correspondiente es el violeta, relacionado con la intuición y el saber. Se bloque con la ilusión.
-
Sahasrara o chakra de la corona: la glándula relacionada es la hipófisis, el centro y conexión con la energía cósmica. Se localiza en la parte superior de la cabeza, el color que le corresponde es el violeta o índigo, blanco u oro. Se bloque por los lazos mundanos.
El uso de las piedras y los chakras
Mediante el poder y la energía de las piedras se puede lograr liberar los traumas reprimidos y comunicar a la persona con su fuente de verdad y poder. Como dije en el artículo anterior, la cura exige concentración.
Las piedras suelen hacer cambios en el aura produciendo desbloqueos, algunas veces muy importantes,en los cuales estamos encaprichados y no queremos salir de él sin darnos cuenta que nos estamos perdiendo lo mejor.
A continuación les pediré que las personas se extiendan en el suelo y se coloquen sobre los puntos energéticos o chakras. Los describo a continuación para que se familiaricen y conozcan.
El uso de las piedras según los chakras
-
Chakra de la corona: Parte superior central de la cabeza.
-
Chakra de la garganta: Base del cuello.
-
Plexo solar: Bajo de las costillas.
-
Chakra sexual: Centro púbico.
-
Chakra del corazón: Arriba del plexo.
-
Chakra del ombligo: Punto umbilical.
-
Chakra de la base: Punto coxal.
Después de los análisis de los problemas que tiene la persona, se actúa sobre los que necesitan mayor limpieza y energía. Luego se eligen las piedras de acuerdo con las propiedades de las mismas. Piedras como la malaquita, que absorben las energías negativas. Además deben recordar que necesitan una purificación después de cada uso.
Tratando de lograr un equilibrio se deberían colocar piedras azules en la cabeza, violeta y rosa en el pecho, por lo menos una piedra dorada en el ombligo y otra oscura en la zona del pubis.
Sería muy importante que la persona tenga un espejo y pueda observar cómo las piedras brillan. Seguramente algunas titilarán más que otras,pudiéndose observar en que puntos del cuerpo la persona necesita más ayuda.
Comentar