Inicio Salud y Medicina Consejos sanos Cómo aliviar y eliminar los mocos
Consejos sanos

Cómo aliviar y eliminar los mocos

Los mocos y la mucosidad pueden ser muy molestos. Descubre consejos útiles para aliviar y eliminar los mocos fácilmente, y de forma completamente natural.

¿Alguna vez te has preguntado por qué aparecen los mocos? Lo cierto es que se trata de una pregunta cuanto menos interesante, ya que a diferencia de lo que erróneamente tendemos a pensar, lo cierto es que los mocos siempre están con nosotros, y no sólo en la zona de la nariz: también tenemos mocos en el estómago, en los pulmones, en el colon… y si eres mujer, también en el cuello uterino. Lo único que ocurre es que ante determinados trastornos, enfermedades o problemas de salud el organismo tiende a producirlos en exceso.

Es lo que ocurre, por ejemplo, cuando tenemos un catarro, un resfriado común o estamos agripados. O incluso cuando tenemos alergia y nuestro organismo ha reaccionado ante ese elemento que lo causa (ya sea polvo, animales como los gatos…). La mucosidad es un mecanismo de defensa, que más que un ‘enemigo’ deberíamos en realidad comenzar a considerarlo como un amigo que nos ayuda a protegernos y a expulsar virus y bacterias. Pero no hay duda que aunque en realidad sea así, cuando nuestro cuerpo los produce en exceso (sobre todo en la nariz), éstos pueden convertirse en un auténtico quebradero de cabeza, bastante molesto e incómodo.

Consejos para aliviar los mocos

En estos casos siempre es útil tener a mano unos cuantos pañuelos -de eso no hay lugar para las dudas-, y a su vez algunos consejos y pautas sencillas que nos ayuden a la hora de aliviarlos, por un lado, y de eliminarlos por otro.

Cómo aliviar los mocos

Desde un punto de vista natural, en la conocida como medicina natural (que pasaba de generación en generación, y que podemos descubrir dentro de los denominados como remedios caseros), podemos encontrarnos con distintos remedios que serán de grandísima ayuda a la hora de aliviar la mucosidad.

Primero que nada, lo fundamental es tratar el problema de raíz desde el primer momento en que notes que la mucosidad te está empezando a molestar, ya que en caso contrario las mucosas tienden a ser mayores, la mucosidad tiende a acumularse en exceso y es posible que se lleguen a endurecer. En caso de ocurrir esto, pueden aparecer otros trastornos y enfermedades más graves, como por ejemplo es el caso de la sinusitis.

Para evitar que esto suceda, puedes seguir los consejos que te proponemos a continuación:

  • Vahos de eucalipto: es tan sencillo como hervir en un cazo una o dos tazas de agua, y cuando el agua entre en ebullición añadir unas gotitas de aceite de eucalipto. Luego debes colocarte delante del cazo, con cuidado de no quemarte, tapándote con una toalla la cabeza e inspirando los vapores. Si lo haces poco a poco y durante varios días en poco verás como esa molesta mucosidad va desapareciendo poco a poco.
  • Bicarbonato de sodio, agua y sal: se trata de un remedio natural tan clásico como sencillo. Consiste en preparar una mezcla de agua, bicarbonato de sodio y sal, colocarlo en un gotero y aplicarlo en la nariz.
  • Jarabe casero: un jarabe casero a base de cebolla y miel ayuda no solo a la hora de aliviar la mucosidad, sino que es ideal incluso para combatir y mejorar la tos. Su preparación es muy sencilla, ya que solo tienes que cortar una cebolla grande en trozos pequeños y colocarlas en un tarro de cristal de 250 gramos, al que añadirás seguidamente dos cucharadas soperas de miel. Mezcla bien y deja en maceración durante 10 horas. ¡Listo! puedes tomar a cucharadas poco a poco.
  • Para aliviar mocos en el pecho: si además de mocos en la nariz los sientes en el pecho, una forma útil y natural de aliviarlos es elaborando una infusión de jengibre y cardamomo.

El jarabe es ideal para aliviar los mocos

Estos consejos naturales y sencillos son especialmente útiles a la hora de aliviar la mucosidad. No obstante, recuerda que en caso de mucosidad excesiva, que te impida respirar o que dure demasiado siempre lo más aconsejable es acudir al médico antes e automedicarte.

Imágenes | William Brawley / Sterling College

Este artículo se publica solo con fines informativos. No puede ni debe sustituir la consulta a un Médico. Le aconsejamos consultar a su Médico de confianza.

C.Pérez

Escribo sobre ciencia, salud y nutrición desde hace 11 años. ¡Ah! Y también papá a tiempo completo con 4 años de experiencia.

PUBLICIDAD

Comentar

Publicar comentario