Como de buen seguro sabrás hay un sinfín de las llamadas recetas de la abuela para lograr una especie de muro de contención para darle una verdadera paliza al mal de la gripe, que nos suele invadir cuando se despide el otoño y comienza el temido invierno.
Pero sin dudas antes de avanzar con respecto al tema en cuestión debemos distinguir cual es la diferencia entre gripe y resfriado, dado que no son iguales y en muchas ocasiones tendemos a confundirlas de forma muy habitual.
Primero hay que saber que en los dos casos estamos hablando de distintos virus que atacan a nuestro organismo. Otra diferencia es que el resfrío es de menor duración que la gripe. El resfriado se presenta en sociedad con los siguientes síntomas: secreción nasal, congestión nasal y estornudo. La gripe a la congestión nasal hay que sumarle: fiebre alta (38º o más), dolor de cabeza, dolor muscular, malestar generalizado, decaimiento, toz y dolor de garganta.
Otra diferencia clave para distinguir el resfriado de la gripe es que no presenta fiebre y suele durar aproximadamente una semana. La gripe dura alrededor de dos semanas como mínimo y en algunos casos puede ser mortal sobre todo en grupo de riesgo como ancianos y recién nacidos
A prestar atención
En el caso de que la persona presente cuadro de fiebre sostenida debe seguir los siguientes consejos:
- Beber mucho liquido.
- Disponga de un ambiente ventilado y con una adecuada renovación del aire.
- Si tiene tos, para evitar el contagio hacia otras personas tápese la boca con la parte interior del codo.
- Si esta contagiado evite compartir la misma toalla con el resto del grupo familiar.
Trucos naturales para prevenir la gripe
Uno de los trucos naturales más adecuados y más simples para evitar el contagio de la gripe es el de lavarse frecuentemente las manos tanto antes y después de comer como después de ir al baño o cuando volvemos de la calle luego de estrechar la mano a un vecino.
Ya desde antiguas civilizaciones se utilizaban recetas naturales para combatir la gripe. Es el caso de los mayas y los aztecas que utilizaban una mezcla de chile con miel y tabaco. En el caso específico de los aztecas investigaciones recientes indican que implementaban plantas naturales para curar la gripe.
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Es el caso de la “Iztacpatli” (Psoralea pentaphylla) que era un eficaz febrífugo o antitérmico. O la “ Aceitilla” (Bidens odorata ) un conocido febrífugo que también es utilizado en la actualidad como aliviador de los empachos digestivos.
Otras plantas de uso natural para bajar la fiebre en la actualidad son la caléndula, el gorfolobo, el jengibre, el sauce, sauco, loto, rabos de cereza, ciprés y el eucalipto.
El más conocido por todos es el eucalipto que se usa especialmente en vapores de baño, como también en infusiones o también en jarabes.
Descubre Cómo preparar vahos de eucalipto.
Otra figura estelar sin dudas es el limón que tiene un enorme poder curativo para sanar las vías respiratorias. Comprobado revitalizador del sistema inmunológico lo cual lo hace un gran recuperador de enfermedades infecciosas causadas por virus y bacterias. Utilizado en infusiones, vaporizadores también es proveedor natural de vitamina C.
Por último el romero es muy útil para la recuperación de problemas como bronquitis, gripe y resfríos y se lo puede utilizar como vaporizador, infusiones o colocándolo en pequeñas gotas en cercanía de la nariz.
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