Seguro que muchos de vosotros tenéis que comer o almorzar en vuestros propios puestos de trabajo. La verdad que os entendiendo a la perfección ya que a veces resulta imposible pasarse por casa y descansar un poco debido a que apenas disponemos de media hora para comer. Debido a esta situación, son muchas las personas que deciden llevarse la comida al trabajo y comerla directamente allí sin tener que perder demasiado tiempo en el proceso.
En la mayoría de ocasiones, resulta una solución de lo más socorrida para así retomar nuestra actividad laboral en la mayor brevedad posible. Pero claro, ese este sistema de “ingesta exprés” también puede tener efectos negativos para nuestra salud, sobre todo en lo que a todo nuestro sistema intestinal se refiere.
Y es que si abusamos de esta práctica, solo vamos a conseguir que a la larga suframos por ejemplo de diarrea, estreñimiento, colesterol alto e incluso diabetes. En este sentido, desde Natursan os aconsejamos que cuando llegue la hora del almuerzo, os toméis un momento de tranquilidad y sosiego siguiendo para ello una serie de consejos que vamos a describir a lo largo de este artículo.
Tres saludables consejos para comer en el trabajo
Hay que destacar que la mayoría de ellos son muy sencillos de llevar a cabo y apenas supondrán un cambio demasiado radical en vuestra rutina. Y por ello, os recomendamos encarecidamente que les deis una oportunidad.
Dile adiós a la comida rápida
Ya sabemos que los restaurantes de comida rápida en general nos ofrecen una solución rápida y viable a la hora del almuerzo. En apenas cinco minutos ya tendremos lista nuestra comida que podremos “devorar” en un auténtico abrir y cerrar de ojos.
Sin embargo, hay que tener en cuenta que la mayoría de estos alimentos no son para nada saludables. Las hamburguesas contienen un alto contenido en grasas saturadas donde el pan está además hecho de harinas refinadas que suelen ser de lo más perjudiciales para nuestra salud.
Todo ello sin comentar que las bebidas gaseosas que acompañan a este tipo de comida tienen un alto contenido en azúcar que solo va descuidar nuestra línea y que nos van hacer sentir de lo más empachados y molestos a la hora de volver a nuestro puesto de trabajo.
No te pierdas: Recomendaciones al comer fuera de casa
Hazte un menú semanal
¿Y qué podemos hacer para tener la comida preparada antes de salir por la mañana a trabajar? Pues ante todo, vamos a necesitar un poco de organización de nuestra parte. En este sentido, cada vez se lleva más hacerse una especie de calendario de comidas semanal donde tendremos ya apuntada la comida que vamos a tomar de lunes a viernes
No hace falta que os digamos que vuestra dieta tiene que ser de lo más sana y equilibrada posible. Aunque hay algunos alimentos como las frutas y las verduras que podréis preparar en tan solo unos minutos y que podréis llevar a vuestro trabajo sin problema alguno.
Es lo que ocurre por ejemplo con las ensaladas. Se pueden tomar frías, solas o como simple guarnición de cualquier plato, mientras que al mismo tiempo resultan muy sencillas de transportar en cualquier tupper-ware. Podéis hacer lo mismo con frutas que podréis mezclar en una deliciosa macedonia que y que podréis tomar como un postre convencional. Todo ello acompañado de abundante agua para manteneros hidratados en todo momento.
Estipula el lugar y la hora donde vas a comer
¿Sois una de esas personas que a la hora del almuerzo apenas desconecta y se pone a comer delante de la pantalla del ordenador mientras que al mismo tiempo está trabajando? Pues ya es hora de darse un pequeño respiro. Debéis tomaros cualquier comida como una especie de ritual que no os podéis perder.
Un espacio de tiempo que debéis reservar para este menester y donde nada ni nadie os puede molestar. Para ello, una buena idea es salir de la zona de trabajo (como el despacho) y comer en una zona más apartada como un comedor o una habitación que esté menos concentrada de gente.
Y deberéis masticar muy bien cada trozo de comida para que así disfrutéis mucho mejor de todos sus sabores a lo largo de vuestro paladar. Recordad que comer es uno de los mayores placeres que existen y disfrutarlo en vuestra rutina diaria hará que volváis al trabajo con un mayor positivismo.
Lee más: La mejor hora del día para desayunar, comer y cenar
Comentar