No hay duda que la lactancia materna es un hábito fundamental saludable tanto para la mamá como para el recién nacido. Y es que la leche materna se constituye como el único alimento que cuenta con todos los nutrientes que el bebé necesita luego de haber nacido, y que le aporta todos aquellos nutrientes indispensables para su correcto desarrollo y crecimiento.
La leche materna es rica en aminoácidos esenciales (fundamentales para el desarrollo del cerebro del bebé), glóbulos blancos, enzimas e inmunoglobulina (que lo protegen de las infecciones), y también aporta vitaminas, minerales, proteínas, grasas y anticuerpos esenciales que lo protegen. Además, es fácilmente digerible y reduce el riesgo de que el bebé padezca enfermedades graves.
Pero sus beneficios no son solo para el recién nacido, sino también para la mamá: reduce el riesgo de cáncer de mama y de ovario, favorece la recuperación del útero tras el parto, y sobretodo, favorece el contacto con el bebé, creando una relación muchísimo más especial e íntima.
Teniendo en cuenta que la leche materna es especialmente rica en nutrientes, es fundamental que la mamá lactante siga una dieta adecuada, siendo imprescindible que siga una dieta variada y equilibrada.
La mejor dieta para la mamá lactante
Es fundamental que la mamá que le da el pecho a su bebé siga una dieta variada y lo más equilibrada posible, rica sobretodo en alimentos naturales, sanos y saludables que le aporten aquellos nutrientes que su organismo necesita para la producción de leche óptima y adecuada.
Alimentos a consumir diariamente
Se recomienda que la mamá consuma cada día 5 porciones de frutas y verduras frescas, así como al menos de 5 a 6 raciones cada día de cereales integrales, ya que la mamá necesita de fibra y otros nutrientes que sólo estos alimentos le aportan.
También se deben tener en cuenta los alimentos ricos en calcio, como la leche, yogures, quesos y otros derivados lácteos, fundamentales para ayudar a mantener niveles normales de este importantísimo mineral en su organismo.
Los frutos secos aportan a su vez ácidos grasos esenciales, destacando en este sentido las almendras, nueces y avellanas. Se recomienda que consumas 25 gramos cada día.
Alimentos a consumir varias veces por semana
Muchos nutricionistas aconsejan a la mamá consumir cada semana 3 raciones de alimentos ricos en proteínas, como por ejemplo las legumbres, carnes magras, pescados y aves (sin piel).
La importancia de tomar mucho líquido
El líquido es fundamental, sobretodo para la correcta formación de leche materna (que fundamentalmente destaca por su presencia en agua).
Lo mejor es optar por agua natural mineral, zumos frescos de frutas, sopas o caldos e infusiones.
Más información | Lactancia materna
Imagen | viralbus
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