Seguramente que en algún momento hayas tenido una digestión pesada. En la mayoría de los casos aparece como consecuencia de una comida excesiva y muy copiosa, o cuando comemos de forma rápida y en una hora en la que no estamos habituados. No obstante, también existen otras causas que pueden influir en su aparición, aún a pesar de haber disfrutado de una comida saludable y ligera. La digestión pesada aparece cuando un alimento llega al estómago y el proceso de la digestión no se realiza normalmente, y se ralentiza. El resultado es más que evidente: nuestro estómago se inflama, produciendo malestar y otros síntomas relacionados.
Las digestiones pesadas son un problema relativamente frecuente, que cada día sufren muchas personas. En la mayoría de las ocasiones se convierte en algo puntual, que desaparece con algo de reposo y no sobrecargando más al estómago. Pero cuando el malestar y la pesadez surge una y otra vez, de forma repetitiva, lo más aconsejable es acudir al médico para que realice un diagnóstico, y descarte otros problemas de salud posibles que puedan estar influyendo en la aparición de una digestión pesada.
¿Cuáles son las causas de las digestiones pesadas?
Las causas que pueden provocar la aparición de una digestión pesada son varias. Te desvelamos las más habituales:
- Mala alimentación: mantener una alimentación inadecuada y poco equilibrada es una de las causas más comunes de indigestión y de digestión pesada. Determinados alimentos, como los fritos y muy grasos influyen de forma decisiva. También podemos mencionar la comida chatarra y la bollería industrial.
- Comidas copiosas y excesivas: cuando comemos de forma excesiva tendemos a sobrecargar a nuestro estómago, de manera que necesitará más tiempo para hacer bien la digestión.
- Comer rápidamente: además de las comidas excesivas, cuando comemos de forma rápida no damos tiempo a nuestro sistema digestivo a enviar al cerebro las distintas señales que le indican que nos encontramos saciados. Por tanto, tendemos a comer de manera copiosa.
- Alergias a determinados alimentos: si tenemos alergia o intolerancia a algún alimento nuestro sistema digestivo tiende a inflamarse, produciéndose indigestión, gases y flatulencias.
- Estrés y ansiedad: la tensión nerviosa producida por el estrés o por la ansiedad afectan de forma muy negativa a la hora de realizar una buena digestión. Podemos mencionar en esta ocasión la conocida como gastritis emocional.
- Enfermedades del aparato digestivo: la gastritis, la gastroenteritis y otras enfermedades del estómago son una causa común de digestión pesada.
¿Qué síntomas produce la digestión pesada?
Existen una serie de síntomas comunes que aparecen cuando sufrimos de digestión pesada. Son los siguientes:
- Gases (flatulencias): la principal causa que los provoca es comer deprisa, lo que hace que ingiramos y traguemos una mayor cantidad de aire durante las comidas.
- Pesadez de estómago: se siente como si el estómago pesara, teniendo la sensación de tener el estómago lleno.
- Acidez de estómago: se siente como ardor que sube desde el estómago hacia el pecho, y de ahí a la garganta.
- Náuseas y vómitos: aunque no es tan habitual en caso de indigestión, sí es un indicativo claro de que nuestro sistema digestivo no ha aceptado bien el alimento o los alimentos que hemos comido.
¿Cuál es el tratamiento médico a seguir?
Como recomiendan desde Eroski Consumer, cuando la digestión pesada es en cierto sentido difícil de soportar, la principal recomendación es acudir al médico, quién hará un diagnóstico e investigará acerca de si existe alguna causa o enfermedad que haya provocado la indigestión (como por ejemplo piedras en la vesícula biliar o cólicos hepáticos).
Los antiácidos ayudan a frenar la indigestión y sus síntomas asociados, como por ejemplo es el caso de la acidez estomacal. No obstante, si la digestión pesada y el malestar sigue es adecuado realizar una endoscopia digestiva o una ecografía abdominal, que ayudará a descubrir la existencia de alguna patología o si la indigestión es crónica.
Precisamente cuando la indigestión es crónica, además de los antiácidos se prescriben los protectores gástricos, como la ranitidina o el omeprazol después de las comidas, el cual disminuye las secreciones gástricas.
Algunos consejos naturales muy útiles para aliviar las digestiones pesadas
- No bebas en exceso durante las comidas: ¿sabías que beber en exceso durante las comidas hace que tu estómago elimine ácidos y enzimas responsables del buen proceso digestivo?.
- Come despacio: si comes sin prisas, y lo haces despacio, darás tiempo a tu estómago a enviar al cerebro las distintas señales que le indicarán que ya nos encontramos saciados, de forma que no seguiremos comiendo. Al contrario, si comes rápido y deprisa, lo más común es que además lo hagas de forma compulsiva, por lo que terminarás ingiriendo comida en exceso.
- Evita comer y dormir seguidamente: se aconseja comer y no acostarnos hasta trascurridas al menos dos horas, para que nuestro sistema digestivo realice mejor la digestión.
- Mastica lentamente: además de comer despacio es conveniente masticar lentamente los alimentos, de esta manera conseguirás que éstos se trituren mejor, con lo que ayudará al proceso de la digestión.
- Infusión de hinojo y manzanilla: mientras que la manzanilla es un excelente digestivo natural, el hinojo ayuda a prevenir o tratar los gases y las flatulencias. Puedes elaborar una infusión hirviendo en un cazo el equivalente a una taza de agua. Cuando el agua alcance el punto de ebullición añade una cucharadita de hinojo y una cucharadita de manzanilla, dejando hervir durante 3 minutos. Pasado este tiempo apaga el fuego, tapa y deja en reposo durante 3 minutos. Finalmente cuela y bebe.
Imágenes | Eric Chan / Frédérique Voisin-Demery / Tory
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