Escuchar hablar de la hernia de hiato quizá dibuje un gran signo de interrogación en tu rostro, y aunque esta afección no es tan común en el mundo, millones de personas se ven afectadas por tal complicación cada año.
Pero para poner esta explicación en contexto, es necesario que sepas que esta enfermedad se manifiesta a través de una anomalía que se da en el diafragma, el cual es la cavidad muscular que separa tu estómago del abdomen.
De acuerdo a estudios científicos, esta afección ataca a un 20% de la población. Sin embargo, sus síntomas son prácticamente indetectables en muchos casos, de ahí que muchos médicos aconsejen realizarse revisiones periódicas.
La hernia de hiato tiene dos tipos, una llamada hernia por desplazamiento, que consiste en la unión del área gastroesofágica con parte del estómago, mientras que en la otra, llamada hernia paraesofágica, el fondo del estómago se pega de la cavidad del tórax.
Hasta la fecha no se ha descartado ningún rango de edad para padecer de la hernia de hiato, aunque algunos estudios sugieren las personas de 50 años o más son las más propensas a sufrir del mal.
Pero ¿cómo se produce la hernia de hiato en el organismo? Hay diversos aspectos que pueden influir en su aparición.
Causas de la hernia de hiato
La edad: Si bien nadie podría escapar de la hernia de hiato, las personas más viejas son más vulnerables, esto porque a medida que envejecemos, el músculo que envuelve nuestro diafragma se debilita y deja a nuestro estómago más cerca de esta enfermedad.
Ataques de tos: Si usted sufre de ataques de tos constantes, también puede estar más cerca de sufrir de la hernia de hiato. Toser supone un gran esfuerzo para los músculos del diafragma y de nuestro abdomen en general.
No ir al baño: Cuando sufres de estreñimiento y vas al baño, se supone que haces mayor esfuerzo a la hora de defecar. Si tomamos en cuenta que estás ejerciendo presión sobre tu cavidad abdominal, tu estómago sufrirá las consecuencias y podría moverse hacia arriba.
El exceso de peso: La acumulación de grasa en tu abdomen ejerce presión sobre esa zona, y por ende compromete a otros órganos vitales que están en esa área de tu cuerpo.
Levantar objetos pesados y el estrés: Si levantas pesos mayores a los que tienes capacidad, tu abdomen recibirá todo ese impacto. El estrés también causa efectos negativos en esa parte del cuerpo.
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Fumar: Científicos han explicado en diversos estudios los efectos negativos del tabaco en la salud del ser humano. La aparición de la hernia de hiato es otra de las consecuencias que deja esta mala práctica.
Malas cirugías: Si te has practicado operaciones que no hayan salido tan bien en el área abdominal, estarías propenso a sufrir de la hernia de hiato debido a que pueden debilitar o contraer la zona del diafragma.
Los síntomas principales de la hernia de hiato
Los síntomas de la hernia de hiato no siempre logran notarse. Pese a esto, hay algunos cuadros que se manifiestan y que puedes tomar en cuenta.
Dolor al tragar: Debido a la irritación de algunas paredes del esófago, es posible que te cueste tragar, bien sean alimentos o líquidos. Estas molestias se pueden manifestar tanto en la zona baja o en la zona llamada “faríngea”.
Dolor en el pecho: Los dolores y molestias en el esófago también pueden manifestarse en la caja torácica y en la zona abdominal. No son punzadas fuertes pero sí constantes y debes estar alerta ante ellas. Muchas veces se pueden confundir con los síntomas de un infarto.
Presencia de gases: Si luego de cada comida sientes deseos de vomitar y te llenas de gases, también es uno de los síntomas de la enfermedad. El mal aliento constante y el mal sabor de boca sin alguna razón aparente también son algunas de las manifestaciones físicas de la hernia de hiato.
Ardor: Algunos ácidos del estómago podrían irritar las paredes de tu esófago. El tracto digestivo podría liberar ciertos líquidos desde la boca del estómago y generar malestar.
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Para tratar la hernia de hiato no se necesita mayor atención médica, de hecho los tratamientos suelen ser bastante sencillos.
Algunos especialistas indican medicamentos para tratar las molestias estomacales, también para fortalecer los músculos abdominales, y si el caso es muy recurrente, podría ser corregida con cirugía.
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