Entre las diversas enfermedades que afectan al estómago, la más común y padecida de todas es la gastritis. La mayoría de las personas padecen al menos una vez en la vida de dolores estomacales los cuales son más especializadamente conocidos como gastritis; así, éste padecimiento de la medicina moderna ha pasado a formar parte de la cultura científica general, donde se reconoce como una enfermedad crónica en sus etapas más complicadas.
Se le denomina gastritis crónica a la inflamación de la mucosa gástrica, que afecta áreas superficiales y glandulares de la mucosa, llegando a la destrucción glandular y a la metaplasia, prolongándose por mayor tiempo en las personas que una irregular gastritis aguda.
Esta enfermedad se puede observar y diagnosticar mediante endoscopias del aparato digestivo superior, a través de las que se puede observar básicamente si sólo una parte del estómago se encuentra afectada o si toda la esfera gástrica está involucrada.
Tipos de gastritis crónica
Existen dos tipos, descritos a continuación:
Tipo A: afecta al cuerpo y el fondo del estómago sin involucrar en antro; por lo general es asociada a una anemia perniciosa y se presume que tiene una etiología autoinmune.
Tipo B: es la forma más frecuente de la gastritis crónica y afecta al antro en pacientes jóvenes y a toda la mucosa del estómago en personas mayores; es causada por la bacteria Helicobacter pylori.
¿Por qué se cronifica la gastritis?
Las causas de la gastritis crónica son similares a las de cualquier otro tipo de gastritis, la diferencia radica en que estos causantes prolongarán el dolor por más tiempo. Entre las causas más comunes se pueden observar:
- Consumo excesivo de medicamentos antiinflamatorios, los cuales pueden causar irritación de la mucosa del estómago. Medicamentos como la aspirina, el ibuprofeno, el naproxeno, etc.
- El consumo excesivo y continuo de bebidas alcohólicas.
- Infección con la bacteria Helicobacter pylori, la cual infecta el epitelio gástrico pudiendo sobrevivir a éste ambiente tan acido.
Otras causas más comunes son:
- Trastornos auto inmunitarios como la anemia perniciosa
- El reflujo de la bilis hacia el estomago
- El consumo de drogas alcaloides como la cocaína
- La ingesta de líquidos corrosivos o cáusticos, como el veneno
- Infecciones virales
Descubre más sobre: ¿La gastritis puede causar cáncer de estómago?
Además de esto, los malos hábitos alimenticios y el estrés pueden ser causantes de gastritis crónica en las personas así como también el consumo de estimulantes ricos en cafeína como el café y las píldoras analgésicas, populares por su componente principal: el paracetamol. Las bebidas gaseosas que contienen fosfatos y ácidos fosfóricos como estimulantes de la sed también originan tras su exceso el cuadro sintomático de la gastritis.
Cuáles son sus síntomas
En algunas ocasiones los pacientes no presentan ningún tipo de síntomas a la gastritis crónica. De igual manera, lo más normal es que se produzca ardor o dolor en el epigastrio, la falta de apetito, náuseas y vómitos, dolores en la parte superior del vientre o abdomen, y si la gastritis produce sangrado del revestimiento estomacal también se pueden observar síntomas como las heces negras y vómitos con sangre, donde la condición ya adquiere su carácter crónico.
En caso de infección por la bacteria Helicobacter pylori, los síntomas son similares a la dispepsia con dolor en el epigastrio.
¿Cómo es el tratamiento?
El tratamiento médico varía según la causa que esté ocasionando la aparición de la gastritis crónica. Algunas de estas causas desaparecen con el tiempo y en pacientes que no presentan ningún tipo de síntomas suele no prescribirse ningún tratamiento.
Los pacientes deben consultar con su médico sobre si es recomendable dejar de administrarse medicinas como el ácido acetilsalicílico, ibuprofeno u otro medicamento que vulnere las paredes gastrointestinales.
No te pierdas: Cómo curar la gastritis naturalmente
Se pueden emplear fármacos que son de venta libre y recetados por médicos especialistas que disminuyen la cantidad de ácido en el estómago; tales como: los antiácidos, antagonistas H2 (famotidina, cimetidina, ranitidina y rizatidina), e inhibidores de la bomba de protones IBP (omeprazol, esomeprazol, iansoprazol, rabeprazol y pantoprazol).
El tratamiento para la gastritis crónica causada por la anemia perniciosa consiste en la administración de vitamina B12.
Cuando la causa es debido a la bacteria Helicobacter pylori, se suele utilizar una terapia con antibióticos de amplio espectro.
Además de todos estos tratamientos disponibles para la gastritis crónica, es importante que mantengamos un buen régimen de salud y una buena dieta; éste último par de factores será el que garantizará clínicamente no padecer ni los síntomas ni la condición de gastritis crónica.
Comentar